Historia, pregunta formulada por contanzanono4, hace 1 año

Investiga y menciona los cambios culturales que existieron en América colonial del siglo XVI.


EduardoIglesias: En la segunda parte del mismo artículo se examina el cambio que se dio en la percepción de los alimentos a partir de 1680. En este momento fueron aprovechados los productos de la tierra americanos que satisfacían las necesidades básicas de la comunidad, debido a las problemáticas económicas que se vivieron en estos territorios y que imposibilitaban la adquisición de productos de lujo en grandes cantidades.
EduardoIglesias: Así, el autor resalta el proceso de adaptación y apropiación de los alimentos, que si bien no rompía el proceso completamente con la dicotomía entre lo salvaje (americano) y lo civilizado (europeo), si posibilitaba el reconocimiento de la comida americana como parte del sistema cultural español, principalmente cuando la tierra reproducía aquellos patrones de cultivo europeos.
EduardoIglesias: Para fnalizar el autor establece que la comida no debe ser pensada sólo desde el ámbito de los españoles o de los indios, sino como un producto nacido de la experiencia colonial, en un espacio de integración y adaptabilidad de ambos grupos.
EduardoIglesias: El ensayo de Marta Fajardo de Rueda, "El pensamiento de Joaquín de Fiore en la formación de la iconografía temprana de la Nueva Granada", invita a una relectura de la iconografía religiosa del siglo XVII, al analizar la influencia del abad-profeta Joaquín de Fiore en dichas representaciones.
EduardoIglesias: Fiore fue uno de los interpretes y difusores de la corriente milenarista, que estableció una interpretación del Apocalipsis "en la cual no sólo aseguraba la segunda venida del Redentor, sino que dividía la historia de la humanidad en tres épocas: la del Padre, la del Hijo y la del Espíritu Santo", contribuyendo a generar el concepto de mejoría gradual de la humanidad.
EduardoIglesias: Esta utopía fue difundida especialmente por las comunidades religiosas de franciscanos, dominicos y jesuitas, las cuales según algunas interpretaciones estuvieron presentes en sus profecías. Fajardo de Rueda demuestra, retomando otras investigaciones, que estas órdenes religiosas se referían a Joaquín de Fiore como su profeta, lo que generó un conjunto de representaciones pictóricas con base en este pensamiento.
EduardoIglesias: Para indagar la presencia de dicho profeta en la iconografía neogranadina, la autora selecciona algunas pinturas que hacen parte de la colección del Museo de Arte Colonial de Bogotá y que fueron encargadas al pintor santafereño Gregorio Vásquez de Arce y Ceballos para el convento de Santo Domingo Guzmán en Bogotá.
EduardoIglesias: Entre las obras analizadas se destaca el Retrato de Vásquez en la puerta del convento de Santo Domingo, que en realidad representa los retratos de los santos Domingo y Francisco que el abad Joaquín dejó pintadas en Venecia, en la iglesia de San Marcos.
EduardoIglesias: La explicación continúa con la pintura del Nacimiento del Niño Domingo, también relacionada con este abad, quien indicó que Francisco y Domingo estarían predestinados a su misión evangelizadora y que ésta se conformaría desde su nacimiento. Asimismo, se estudian las obras San Francisco de Verona e Isabel Flores de Lima, conocida como Santa Rosa de Lima, desde esta misma corriente.
contanzanono4: gracias crack

Respuestas a la pregunta

Contestado por EduardoIglesias
1

Cambios culturales que existieron en América colonial del siglo XVI.

La historiografía colombiana ha realizado múltiples reflexiones sobre la Colonia desde diferentes aspectos sociales, políticos, económicos y religiosos. Las investigaciones han abarcado tanto las implicaciones de la Conquista, las formas de resistencia de los grupos indígenas, las relaciones entre colonizador y colonizado, como también las ambigüedades del discurso religioso, las formas de esclavitud y la organización de estructuras políticas y económicas locales1. Todo ello, a partir del análisis de discursos y fuentes tradicionales que han enriquecido enormemente nuestros estudios y que son referencia obligada del historiador, pero que no permiten vincular estas problemáticas con otras perspectivas de análisis. Esta preocupación no es nueva en el país; ya varios autores han llamado la atención sobre la necesidad de abordar nuevos documentos históricos y de establecer cierto contacto interdisciplinario con áreas tales como la flosofía, la antropología, la sociología, la economía y la arqueología2. Este objetivo se cumple en el libro titulado "Historia, cultura y sociedad colonial siglo XVI-XVIII. Temas, problemas y perspectivas", una compilación realizada por Yobenj Aucardo Chicangana-Bayona de 13 ensayos escritos por historiadores de gran trayectoria y nuevos investigadores que se interesan por estudiar la Colonia; retomando documentos clásicos y utilizando nuevos aspectos teórico-metodológicos.

Este texto se compone de dos partes: La primera, América Colonial: Caribe, Perú y Brasil, reúne tres artículos de los autores Yobenj Aucardo Chicangana Bayona, Ana Raquel Portugal y Ronaldo Vaifas estos dos últimos historiadores del Brasil-, quienes escriben sobre las ilustraciones de las cartas atribuidas a Américo Vespucio, los ayllus en las crónicas quinientistas del Perú y la diáspora judía entre Ámsterdam y Brasil durante los siglos XVI y XVII. La segunda parte, El Nuevo Reino de Granada, realiza un recorrido por la historia colonial colombiana a través de diferentes estudios de caso que discurren entre los siglos XVI y XVIII. Son 10 los artículos que estructuran esta parte y los que a su vez se subdividen en cuatro secciones.

Oigan arriba esta lo que falta aquí. Lo que hable en los comentarios .

Otras preguntas