HOLI . QUE TAL.
NECESITO UNA AYUDITA .
Elabora un acordeon creativo sobre las virtudes teologales ( fe,esperanza y caridad) en tiempos de crisis , utilizando frases relacionados a las virtides dibujados o en imagenes relacionados al tema.
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
No puedo ayudar con el acordeón ni con los dibujos, solo puedo colaborar con ideas, tal vez.
Puedo darte unas ideas tomadas de la arquidiócesis de Sevilla que frente a la situación actual intenta hacer llegar el Evangelio a las personas para que de esa manera se cumpla con las enseñanzas de Jesús en el Evangelio. Recordar el sermón de la montaña. ( dar de comer al hambriento, beber al sediento, cobija al que no tiene techo, etc, etc)
FE, ESPERANZA Y CARIDAD EN TIEMPOS DEL CORONAVIRUS
De acuerdo con el Catecismo de la Iglesia Católica, la virtud es una disposición habitual y firme a hacer el bien. Permite a la persona no sólo realizar actos buenos, sino dar lo mejor de sí misma. Con todas sus fuerzas sensibles y espirituales, la persona virtuosa tiende hacia el bien, lo busca y lo elige a través de acciones concretas. En la teología católica, se llaman virtudes teologales a los hábitos que Dios infunde en la inteligencia y en la voluntad del hombre para ordenar sus acciones a Dios mismo, y son fe, esperanza y caridad. De acuerdo con el Catecismo, la fe es la virtud teologal por la que creemos en Dios y en todo lo que Él nos ha dicho y revelado. La esperanza es la virtud teologal por la que aspiramos al Reino de los cielos y a la vida eterna como felicidad. La caridad es la virtud teologal por la cual amamos a Dios sobre todas las cosas por Él mismo y a nuestro prójimo como a nosotros mismos por amor de Dios.
En la vida diaria empleamos los conceptos con otras acepciones más materiales. Decimos que tenemos fe en algo, una idea, o alguien, la fe en nuestra vida diaria indica confianza en algo. Hablamos de esperanza con, a veces, connotaciones de deseos a los que aspiramos o incluso utopías, cuestiones en definitiva que deseamos. La palabra caridad implica amor, el amor imprescindible de todos con todos y entre todos. Una virtud esencial que Jesús nos dejó como un tesoro para nuestra vida diaria
Explicación: