Hola... Ustedes saben mas especificicamente sobre ¿la psicología científica como afecta a la persona? así muy desarrollada
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Suele establecerse una dicotomía entre lo físico, lo biológico, lo orgánico… frente a lo “mental”, lo psicológico. Sin embargo, no es tanta la diferencia; no hablamos de conceptos tan alejados, sino más bien, relacionados. Nos referimos a partes de un todo global que es la persona. Atendiendo a lo anterior, “Lo mental” se refiere en realidad, a lo psicológico, a lo comportamental, a lo que sentimos, pensamos, hacemos, decimos. No es nada esotérico. ni nada que suceda al margen de nuestro cuerpo, de nuestro organismo, de lo físico. La conducta tiene una base biológica, que es precisamente la que la permite. No podríamos comportarnos, sin un organismo que “se comporte”. Y al mismo tiempo, éste comportarse en nuestro entorno, influye en lo físico, en nuestro organismo.
Por lo que finalmente, “cuerpo” y “mente” o mejor dicho “lo orgánico” y “lo psicológico” están íntimamente relacionados. Para confirmarlo no tenemos más que fijarnos en nuestra propia experiencia: ¿Cuántas veces el estrés nos ha producido secuelas físicas como caída de pelo, erupciones cutáneas, malestar estomacal, bajada de defensa? y como éste, otros muchos ejemplos (Ej. Un trastorno de la alimentación tiene claras repercusiones físicas, sin que el origen de dicho trastorno sea orgánico). A la inversa también encontramos múltiples ejemplos: Padecer una enfermedad física crónica o incapacitante puede tener un coste psicológico importante (bajada del estado de ánimo, ansiedad, pensamientos de desesperanza que generan mucho abatimiento).
Explicación:
La gente lega, normalmente explica los problemas considerados “psicológicos” en base a sus experiencias vitales previas, a lo que ha visto en su entorno, al saber popular (“Yo creo que lo que te está pasando es esto”, “A mi primo le pasó algo parecido”, “Si no hicieras esto, la cosa iría mejor”…) Aunque estas explicaciones y consejos pueden tener parte de razón y una clara función de apoyo y orientación, pueden ser muy inadecuados cuando se pasa por alto que no todos los casos son similares, y que no a todas las personas nos valen las mismas “recetas”.
Lo que origina y mantiene problemas aparentemente similares puede variar mucho de unas personas a otras y precisamente por esto, lo que les sirve a unos no les sirve necesariamente a otros. El gran peligro está cuando aquello que, con toda la buena voluntad nos recomiendan, contribuye a un agravamiento del problema, pues se parte de un desconocimiento absoluto de los procesos científicos que subyacen a la génesis y al mantenimiento de dicho problema psicológico (algo que sí conoce el profesional de la psicología).