historia completa del microfutbol
Respuestas a la pregunta
El fútbol sala, también conocido como fútbol de salón, futsal o microfútbol, nació en el año 1930 en Montevideo (Uruguay), cuando el profesor Juan Carlos Ceriani llevó la práctica del fútbol a escenarios cerrados. ¿El motivo? El éxito del fútbol llevaba a muchos jóvenes de la época a disfrutar del deporte, lamentablemente sin campos suficientes para todos, por lo que este se practicaba en las calles y terrenos pequeños.
Por ello, con una solución en mente, el profesor tuvo la idea de adaptar las normas del fútbol a una combinación con reglas de otros deportes. Por un lado cogió la dimensión del terreno y las porterías del balommano, por otro tomó del waterpolo las reglas para el portero y, por último, para el número de jugadores y tiempos de juego se basó en el baloncesto. Todo esto para que los más jóvenes pudiesen disfrutar del deporte en un campo más pequeño y duro.
Llamó a este juego “fútbol de salón” y no tardó mucho en convertirse en un completo éxito, causando sensación en el lugar que lo vió nacer para, poco a poco, ir extendiéndose a nuevos lugares de Sudamérica y finalmente dar el salto a todos los continentes. Todo esto de manos de un profesor ambicioso que, mientras daba un orden a las reglas de este deporte, trabajaba en la Asociación Cristiana de Jóvenes de Montevideo (YMCA).
El primer libro con reglas del fútbol sala fuepublicado en 1933 por el propio creador de este deporte como una forma de poder seguir extendiendo esta exitosa disciplina. Eso sí, no fue hasta 32 años después cuando se creó la primera organización internacional del futsal, la Confederación Sudamericana de Fútbol de Salón, mismo año en el que también tuvo lugar el primer campeonato sudamericano de selecciones.
En 1971 se fundaba en San Pablo la Federación Internacional de Fútbol de Salón (FIFUSA), organización que lograba que en 1982 tuviese lugar el primer mundial del deporte y, posteriormente, otros seis más. Un gran objetivo de una organización que se mantuvo totalmente independiente hasta su disolución en 2002, cuyo legado fue tomado por una nueva organización llamada Asociación Mundial de Futsal (AMF) que nacía tras no llegar a un acuerdo de unificar el deporte con la FIFA. Eso sí, nada impedía el crecimiento de este deporte de ritmo frenético y gran calidad que podemos disfrutar hoy.