Castellano, pregunta formulada por portalernesto280, hace 27 días

Hedor En la época que nos ocupa (siglo xvim), reinaba en las ciudades un hedor apenas concebible para el hombre moderno. a Las calles aestaban a estiércol, los patios interiores apestaban a orina, los huecos de las esca- leras apestaban a madera podrida y excrementos de rata; las cocinas, a col podrida y grasa de carnero; los aposentos sin ventilación apestaban a polvo enmohecido; los dormitorios, a sábanas grasientas, a edredones húmedos y al penetrante olor dulzón de los orinales. Las chimeneas pestaban a azufre; las curtidurías, a lejías cáusticas; los mataderos, a sangre coagulada. Hombres y mujeres apestaban a sudor y a ropa sucia; en sus bocas apestaban los dientes infec- dos, los alimentos olían a cebolla y los cuerpos, cuando ya no eran jóvenes, a queso rancio, a che agria y a tumores malignos. el siglo XVIII aún no se había atajado la actividad corrosiva de las bacterias y, por consiguient había ninguna acción humana, ni creadora ni destructora, ninguna manifestación de la vie piente o en decadencia que no fuera acompañada de algún hedor. Patrick Süskind, El perfu



a) escribe él tema del texto ​

Respuestas a la pregunta

Contestado por ruizromeroalberto55
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Respuesta:

oliiiiisssssss como estas

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