hacer una línea del tiempo del libro de historia sexto grado página 94 95
Respuestas a la pregunta
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El islam y la expansión musulmana
Los árabes congregaban pequeñas tribus nómadas que compartían
el mismo idioma y usaban el santuario de la Kaaba (hoy en Arabia
Saudita) como lugar de culto a sus deidades. Este edificio cúbico
resguardaba los ídolos de las diferentes tribus, así como una piedra
negra (posiblemente un fragmento de meteorito) al que veneraban.
Las tribus árabes mantenían relaciones pacíficas y comerciaban
entre ellas. Sólo una pequeña parte del territorio de Arabia era cul-
tivable debido a su naturaleza desértica, por lo que la agricultura no
se desarrolló. En el siglo VII d. C. todas las tribus árabes se unifica-
ron, bajo el liderazgo de Mahoma, al adoptar la religión del islam.
A partir de entonces se expandieron hacia Oriente Medio, el norte
de África y la península ibérica.
Mahoma y el nacimiento del islam
Mahoma nació en el año 571 d. C. en La Meca, ciudad donde se en-
cuentra el santuario de la Kaaba. Según señala la tradición, recibió
la visita del arcángel Gabriel, a quien identificó como mensajero de
“Guerreros árabes a la conquista de España”, manuscrito del Al-Hariri, 1237.
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Alá (“el Dios, la Divinidad”). Este suceso, conocido como
la noche del
destino
, hizo que Mahoma comenzara a predicar una nueva religión
monoteísta: el islam. La palabra
islam
significa “sumisión” (a la vo-
luntad de Alá) y a los creyentes se les llama
musulmanes
, que quiere
decir “sumisos”. Mahoma tuvo muchos seguidores, pero también ene-
migos que no estaban de acuerdo con sus ideas. Perseguido por sus
adversarios, huyó de La Meca en el año 622 d. C. Este suceso marcó
el inicio de la era musulmana y se llamó la
Hégira
, que significa “la
emigración”.
Mahoma se dirigió a la ciudad de Medina, donde se dedicó a escri-
bir El Corán, libro sagrado de los musulmanes, en el que plasmó los
principales
preceptos
del islam: la existencia de un solo dios verdade-
ro, Alá, y los deberes de los musulmanes (la oración, la profesión de la
fe, la caridad, los ayunos y la peregrinación a La Meca por lo menos
una vez en la vida). También establece como obligación participar en
la “guerra santa” (
yihad
) para defender y difundir su religión.
Años más tarde Mahoma regresó a La Meca al mando de un fuer-
te ejército y conquistó la ciudad. Poco a poco unificó a los árabes en
una misma fe y un solo gobierno. Tras la muerte de Mahoma, los ca-
lifas (del árabe
jalifa
, que significa “reemplazante”) continuaron con
la expansión de la doctrina y conquistaron una región muy extensa
que abarcaba Mesopotamia, Siria, Persia e India. Asimismo, ocupa-
ron Tierra Santa, Egipto y el norte de África. A principios del siglo
V±±± cruzaron el estrecho de Gibraltar y conquistaron la mayor parte
de la península ibérica (los actuales territorios de España y Portugal)
e intentaron invadir el reino de
Francia, pero fueron derrotados.
Los musulmanes fundaron va-
rios reinos en la península ibérica
y permanecieron ahí desde el año
711 hasta 1492. Esta ocupación
tuvo notables consecuencias para
la cultura occidental, ya que los
musulmanes dejaron una heren-
cia importante, como las apor-
taciones lingüísticas al español,
además de que redescubrieron los
conocimientos griegos e introdu-
jeron en Europa diversos saberes