Frases con tono irónico y explicar a qué, o a quién se refieren de la obra del matadero
Respuestas a la pregunta
Algunas ironías y sarcasmos que puede rescatar de la lectura "El Matadero"
- "Es de creer que el Restaurador tuviese permiso especial de su Ilustrísima para no abstenerse de carne, porque siendo tan buen observador de las leyes, tan buen católico y tan acérrimo protector de la religión, no hubiera dado mal ejemplo aceptando semejante regalo en día santo." Ironía respecto a la relación de Juan Manuel de las Rosas con la Iglesia, y de como una institución de paz, apoyaba a un hombre malo.
- "¡Que nobleza de alma! ¡Que bravura en los federales! ¡Siempre en pandillas cayendo como buitres sobre la víctima inerte!" La forma "alegórica" de referirse a los abusos de los federales resulta un sarcasmo
- "¡Ay de vosotros, pecadores! ¡Ay de vosotros, unitarios impíos que os mofáis de la Iglesia, de los santos, y no escucháis con veneración la palabra de los ungidos del Señor! ¡Ay de vosotros si no imploráis misricordia al pie de los altares! Llegará la hora tremenda del vano crujir de deintes y de las frenéticas imprecaciones. Vuestra impiedad, vuestras herejías, vuestras blasfemias, vuestros crímenes horrendos, han traído sobre nuestra tierra las plagas del Señor." Ironía sobre como los creyentes trataban a los unitarios de pecadores.
- "Los pobres niños y enfermos se alimentaban con huevos y gallinas, y los gringos y herejote bramaban por el beefsteak y el asado." ironía de como los pobres no podían disfrutar del ganado criado en Argentina, como si podía el extranjero pudiente.
- "pero lo más notable que sucedió fue el fallecimiento casi repentino de unos cuantos gringos herejes que cometieron el desacato de dares un harazgo de chorizos de Extremadura, jamón y bacalao, y se fueron al otro mundo a pagar el pecado cometdo por tan abominable promiscuación." Sarcasmo respecto a el como darse tan buen gusto al comer carne los llevó al infierno.
- "Quizá llegue el día en que sea prohibido respirar aire libre, pasearse y hasta conversar con un amigo, sin permiso de autoridad competente. Así era, poco más o menos, en los felices tiempos de nuestros beatos abuelos, que por desgracia vino a turbar la Revolución de Mayo. Sea como fuera, a la noticia de la providencia gubernativa, los corrales del alto se llenaron, a pesar del barro, de carniceros, de achuradores y de curiosos, quienes recibieron con grandes vociferaciones y palmoteos los cincuentas novillos destinados al matadero." Una forma irónica de expresar como por orden de la iglesia, las costumbres normales de Buenos Aires eran prohibidas y aun así, pocos se beneficiaban de ella.