Francisco fortuny características de su obra de la etapa más importante
Respuestas a la pregunta
Explicación:
Este anexo es una selección de Obras de Mariano Fortuny, pintor español nacido el 11 de junio de 1838 en Reus y fallecido en Roma el 21 de noviembre de 1874), a los treinta y seis años de edad. Fue considerado junto a Eduardo Rosales como uno de los grandes pintores españoles del siglo XIX, después de Francisco de Goya.[1]
De su primera época estudiantil en la Escuela Llotja de Barcelona y de su estancia como becado en la Academia Giggi de Roma, existe abundante material, principalmente estudios con modelo del natural y copias de esculturas antiguas. Esta colección de dibujos de anatomía, escorzos o ropajes tuvo una gran importancia en su evolución
una gran afinidad con el pintor francés Ernest Meissonier. Son obras de pequeño formato, técnica virtuosa y detallista, y escenas llenas de personajes vestidos con casacas, la llamada «pintura de casacones». Las más representativas de este periodo son la acuarela Il contino realizada en 1861, El coleccionista de estampas o el popular episodio de La vicaría; en todas ellas se aprecia cierta influencia goyesca.[3]
La temática de la pintura de Fortuny refleja los numerosos viajes que realizó, a Roma, París y el norte de África. Su primer viaje a Marruecos en 1860, contó con la ayuda económica de la Diputación de Barcelona que lo contrató para que realizara la crónica de los hechos más importantes de la Guerra de África. A su regreso trajo consigo carpetas llenas de bocetos y dibujos, con los que realizaría, entre otras muchas pinturas: La batalla de Wad-Ras y La batalla de Tetuán, esta última composición fue la de mayores dimensiones que realizó. Un nuevo viaje a Marruecos, en 1862, le permitió enriquecer su visión pictórica de dicho país con sus costumbres y personajes.[4]
Gran parte de su obra refleja la moda orientalista, con su carga de pintoresquismo local representando escenas costumbristas de antiguo sabor morisco y andalusí. Los retratos de estos personajes populares suelen ser trabajos rápidos y abocetados donde sólo el acabado de la cabeza está tratado con cuidado y realismo.
Para los óleos, Fortuny solía preparar las telas con fondos oscuros o en tonos rojizos; el posterior uso de la espátula le permitía así determinados efectos sobre esa superficie previamente cubierta con una gruesa capa pictórica. También se aprecian los pequeños surcos realizados con los pelos de los pinceles, que captando la luz en dichas rugosidades conseguían la luminosidad final del lienzo.[5]
Su matrimonio con la hija del pintor Federico Madrazo, les llevó en viaje de bodas a Sevilla y Granada, donde la inspiración de Fortuny se reafirmó en la temática costumbrista o lo genuino, propio de los pueblos mediterráneos. Otro de sus géneros favoritos fue la pintura de paisajes, muchos de ellos de Granada y, ya en los últimos años de su vida, los de Portici. La libertad de pinceladas que se aprecian en esta última etapa italiana ha sido interpretada como un acercamiento al impresionismo tanto por la luminosidad de su gama de colorido como por la textura y el «non finito»; así mismo, las composiciones marcadas con cierto aire japonés lo hacen precursor del valenciano Joaquín Sorolla.[6]
espero sea de tu utilidad❤❤❤❤