Expliquen en qué consistió la división internacional del trabajo ¿por qué se trató de relaciones basadas en la desigualdad?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Las desigualdades y el mundo del trabajo: un gran desafío
de nuestro tiempo
1. En los últimos decenios, el crecimiento de la desigualdad experimentado en muchos
países se ha convertido en un motivo de gran preocupación; las repercusiones
económicas y sociales catastróficas desencadenadas por la pandemia de enfermedad
por coronavirus (COVID-19) desde principios de 2020 han intensificado esta
preocupación y puesto de manifiesto la imperiosa necesidad de tomar medidas. En los
decenios y años que precedieron a la pandemia, se había registrado una tendencia
generalizada al alza de las distintas formas de desigualdad, incluidas las desigualdades
verticales entre ricos y pobres y las desigualdades horizontales entre distintos grupos de la
sociedad, o bien esas desigualdades se habían mantenido en niveles persistentemente
elevados en muchos países. Los avances logrados en la reducción de la disparidad salarial
y en el empleo entre hombres y mujeres también se habían estancado en muchos lugares,
y la magnitud de la violencia por razón de género era cada vez más perceptible. La crisis
repentina de la COVID-19 ha puesto de relieve, y en muchos casos, agravado drásticamente,
algunas de estas desigualdades ya existentes. Si examinamos las múltiples formas de
desventaja que se dan en el mercado de trabajo, todo parece indicar que la pandemia
mundial tiende a agravar las desigualdades y las divisiones de manera totalmente insólita.
2. Antes de que se declarase la pandemia de COVID-19, ya había empezado a cuajar un
consenso mundial en torno a la idea de que los altos niveles de desigualdad tienen
consecuencias sociales, económicas y políticas adversas. La existencia de altos niveles
de desigualdad significa en la práctica que millones de personas no pueden cubrir sus
necesidades o las de sus familias, ahorrar para la jubilación o gozar de protección en caso
de enfermedad. Significa que hay un desequilibrio en las oportunidades de acceso al
mercado de trabajo entre hombres y mujeres, personas de edad y jóvenes, y pueblos
indígenas, migrantes, personas con discapacidad y otros grupos. Significa que los empleos
en todo el mundo están segmentados por nivel de retribución y por nivel de protección
social y del empleo. En estudios recientes se demuestra que estas y otras desigualdades
pueden perjudicar el ritmo y la sostenibilidad del crecimiento económico 1 y podrían
redundar en la degradación del medio ambiente 2
, ralentizar los esfuerzos encaminados a
reducir la pobreza 3
, erosionar la cohesión social y aumentar el riesgo de malestar social o
inestabilidad política