Explica, ¿Cuál crees que sea la trascendencia histórica de la independencia de los Estados Unidos y por qué es importante en la actualidad?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Explicación:
La revolución estadounidense trascendió mucho más allá de Norteamérica y atrajo la atención de algunos
intelectuales de la política en todo el continente europeo. Idealistas notables como Thaddeus Kosciusko,
Friedrich von Steuben y el marqués de Lafayette se unieron a ese grupo para afirmar ideas liberales que
esperaban trasladar a sus propias naciones. Su éxito reforzó el concepto de los derechos naturales en
todo el mundo occidental y fomentó la crítica racionalista de la Ilustración contra un viejo orden edificado
en torno de la monarquía hereditaria y una iglesia oficialmente impuesta. En un sentido muy real, fue
precursora de la revolución francesa, pero sin la violencia y el caos de esta última porque tuvo lugar en
una sociedad que ya era en esencia liberal.
Las ideas de la revolución han sido descritas muy a menudo como un triunfo de las teorías de John Locke
sobre el contrato social y los derechos naturales. Si bien esta descripción es correcta, descarta demasiado
de prisa la incesante importancia del protestantismo calvinista disidente que desde los peregrinos y los
puritanos suscribió los ideales del contrato social y el autogobierno de la comunidad. Los intelectuales
partidarios de Locke y el clero protestante eran importantes defensores de modalidades del liberalismo
compatibles con las que florecieron en las colonias británicas de Norteamérica.
Los especialistas han argumentado que otra tendencia contribuyó también a la revolución: el
"republicanismo". Afirman que éste no negaba la existencia de derechos naturales, pero los subordinaba a
la convicción de que para mantener una república libre se requería un fuerte sentido de responsabilidad
comunal y el cultivo de la virtud de la abnegación en los dirigentes. En cambio, la afirmación de los
derechos individuales e incluso la búsqueda de la felicidad individual parecían egoístas. Por un tiempo, el
republicanismo amenazó con desplazar a los derechos naturales como el tema principal de la revolución.
Sin embargo, la mayoría de los historiadores de hoy conceden que esa diferencia se exageró mucho. Casi
todos los que pensaban en esos temas en el siglo XVIII consideraban que ambas ideas eran las dos caras
de la misma moneda intelectual.
La revolución implica de ordinario agitación social y violencia en gran escala. Según esos criterios, la
revolución de Estados Unidos fue relativamente moderada. Cerca de 100.000 realistas salieron de la
nueva Unión Americana. Varios miles de ellos eran miembros de las viejas elites que sufrieron la
expropiación de sus bienes y fueron expulsadas del país; otros eran sólo gente ordinaria fiel a su rey. La
mayoría de los que fueron al exilio lo hicieron por su voluntad. La revolución abrió y liberalizó aún más a
una sociedad que ya era liberal. En Nueva York y las Carolinas, las grandes haciendas realistas fueron
repartidas entre pequeños agricultores. Las premisas liberales llegaron a ser la norma oficial de la cultura
política estadounidense, ya sea el desconocimiento de la Iglesia Anglicana como religión oficial del país, el
principio de elección del ejecutivo nacional y los estatales o la amplia difusión de la idea de la libertad
individual. Sin embargo, la estructura de la sociedad cambió poco. Con revolución o sin ella, la mayoría de
la gente siguió gozando de seguridad para su vida, su libertad y sus propiedades.