experiencias de resurrección en tu vida cotidiana hoy
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El Evangelio del día nos muestra hoy una nueva aparición de Jesús a los apóstoles. Ellos estaban en el lago, en su trabajo, pescando, cuando Juan se da cuenta de que quien les está observando desde la orilla no es otro que Jesús. "Es el Señor", le dice a Pedro. Acto seguido, Pedro salta de la barca a su encuentro o, más bien, "respondiendo" así a que Jesús se haya hecho presente otra vez.
La Resurrección de Jesús que celebramos estos días (y que no deberíamos cansarnos de celebrar) evidencia que Jesús "pasa", Jesús "ocurre", Jesús "es", en nuestra vida. Está en lo cotidiano, como les ocurrió a los apóstoles. Se presentó en su trabajo y, después comió con ellos. Se mostró a ellos con otro gesto para que lo terminaran de reconocer. Otro gesto cotidiano, como es compartir la comida con ellos. La Eucaristía, ¿te suena?
El mensaje que transmite la Palabra de Dios es de un consuelo y una esperanza grandísimas. Ese mensaje es que Cristo está en todo. Está con nosotros, viviendo lo que vivimos, viendo lo que vemos, alegrándose con lo que nos alegra y sufriendo con lo que nos hace sufrir. Eso es lo que facilita que demos testimonio de Él, aunque nos cueste, en nuestra familia, en nuestra vocación, con nuestra pareja, en el trabajo: la certeza de que podemos encontrarle en cada cosa que hagamos o nos suceda.
Esta experiencia se enriquece aún más con la conversación que mantiene Jesús con Pedro. Tres veces le pregunta Jesús a Pedro si lo ama. El apóstol se entristece, porque piensa que Jesús duda de él. También, porque tres veces el que dudó de Jesús fue Pedro. Las preguntas de Jesús a Pedro, sin embargo, no son una acusación si no una llamada posterior a "apacentar el rebaño", como hoy hace la Iglesia.
Explicación: