¿Existía unidad de criterio en cuanto al manejo de la política exterior Argentina?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Antes de hablar de la Política Exterior Argentina, resulta importante dejar en claro algunas definiciones.
En primer lugar, hay que hacer una diferencia entre política exterior y diplomacia. En el primer caso, se hace referencia al accionar internacional resultante del desarrollo de objetivos propios, o de respuestas (reaccionar) a impactos externos. En el segundo, se considera la actividad vinculada al relacionamiento del Estado, o la negociación de determinados temas o problemas; más allá de que esta actividad esté vinculada a un proyecto de país o a objetivos concretos.
En segundo lugar, hay una clara diferencia entre política externa como "acción externa" y política externa como "solución de problemas" (2). La primera es la resultante de la "acción" del Estado hacia el ambiente internacional, de acuerdo con objetivos preestablecidos, en función de un proyecto -explícito o no- y respaldado por el poder del que dispone -poder propio más el de los aliados- (3). La segunda es la resultante de la "reacción" -ad hoc- del Estado frente a "impactos" provenientes del ambiente internacional, -impactos no contemplados en el proyecto o en los objetivos-.
En la generalidad de los casos, son los Estados poderosos los que tienen una política externa como acción externa -establecimiento de orden o de pautas de orden-, mientras que los débiles tienen generalmente una política externa como solución de problemas -reacción frente a la suba o baja del precio de materias primas; problema de la suba o baja de la tasa de interés vinculado al tema deuda; etc.-. No obstante ello, los Estados poderosos pueden verse frente a circunstancias de "reacción": v. gr.: el mundo industrializado frente al impacto OPEP; o EUA en el caso de la "Crisis de los Rehenes de Irán" en el período Carter. Lo que nos demuestra la posibilidad inversa. Los países de la OPEP, aunque débiles y subdesarrollados, produjeron una "acción" internacional, suficientemente importante como para modificar pautas de orden preestablecidas -no por ellos-. Lo mismo ocurrió en el caso del Irán de Khomeini, débil en cuanto a capacidad militar frente a la primer potencia militar del bloque occidental. No obstante ello, le costó la reelección a Carter y la continuidad en el poder al partido demócrata.