etapas de alegoria de la caverna
Respuestas a la pregunta
Las etapas de la Alegoría de la caverna son tres: El encierro, la ascensión a la luz y el retorno a la caverna.
El encierro. Comienza Platón la descripción de su alegoría con un espacio cavernoso. En dicho espacio se encuentran unos prisioneros atados, desde su nacimiento, por cadenas sujetando cuellos y piernas. Las ataduras les impiden girar la cabeza, así que solo pueden mirar hacia el fondo de la caverna.
Detrás de ellos se encuentra un muro con un pasillo que ellos no pueden ver desde su posición y una hoguera que proyecta luz sobre la pared de la caverna. Asimismo, por el pasillo circulan otros hombres portando objetos cuyas sombras son proyectadas sobre la pared por la hoguera. Estas sombras son la única cosa que los prisioneros pueden ver.
Los hombres encadenados están obligados entonces a dar por cierto todo lo que la luz proyecta sobre la pared. No tienen cómo saber que hay un pasillo, una hoguera, gente transitando, ni siquiera que la caverna tiene una salida. Desconocen el mundo que existe a sus espaldas.
La ascensión a la luz. En la segunda etapa de la narración, Platón se pregunta qué pasaría si uno de estos hombres fuese liberado. Inmediatamente giraría hacia la hoguera y contemplaría una nueva realidad. Esta nueva realidad sería complemento de una anterior, la que percibía reflejada por la luz de la hoguera sobre la pared de la caverna.
Continúa Platón, si una vez que el hombre haya asumido su nueva realidad es obligado a salir de la caverna apreciaria entonces una realidad exterior. Esta otra realidad estaría conformada por elementos del mundo inteligible como hombres, árboles, sol, etc. Así pues, este hombre tendría ya varia realidades para comparar.
El retorno a la caverna. Concluye Platón la alegoría haciendo entrar de nuevo, al prisionero al interior de la caverna para liberar a sus antiguos compañeros de cadenas. Estos con toda seguridad, se burlarian de él al oír las nuevas realidades recién descubiertas. Le dirían que sus ojos enfermaron por el cambio de oscuridad a luz y nuevamente a oscuridad. Asegura Platón que serían incluso capaces de asesinarlo si intentara sacarlos de la caverna.