Escribe una historia dónde uno de tus familiares haya participado en un hecho histórico de El salvador
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Respuesta:
este es un ejemplo ojala te sirva y coronita por fa uwu
Explicación
Roberto Cañas: «Protocolo del evento hizo que Cristiani firmara los acuerdos de paz»
Dieciséis días habían pasado de aquel frío enero de 1992. El alba rompía el silencio de la noche, el sol alumbraba hasta los más íntimos rincones de la ciudad de México, aquella luz anunciaba esperanza para muchos en un lejano país en la América Central. No era un día cualquiera. La estampa de varias firmas de hombres con pensamientos diferentes, tan diferentes hasta la muerte, pondría fin a una implacable guerra civil.
El Castillo de Chapultepec, México, uno de los sitios más significativos y sagrados de aquel país, seria el escenario en donde los dos principales actores de la guerra civil en El Salvador, terminarían con 12 años de conflicto armado que dejó una vergonzosa cifra de 75,000 muertos, según datos de la Comisión de la Verdad de las Naciones Unidas.
Entre las flores púrpuras y amarillas que dividían a los representantes de ambos bandos, la alfombra roja, las cámaras de televisión y los invitados especiales, estaba sentado en primera fila de la historia, Roberto Cañas, uno de los 10 integrantes de la comisión negociadora del Frente Farabundo Martin para la Liberación Nacional (FMLN). Fue una ceremonia histórica, tanto para su vida personal, como para la vida de muchos salvadoreños que anhelaban la paz.
Los mexicanos tiraron la casa por la ventana al brindarnos un protocolo de excelencia, esto, aparte que nos otorgaron uno de sus sitios significativo y sagrados, el Castillo de Chapultepec-, mencionó Cañas, y no era para menos, ese día era un hecho de trascendencia a inicios de la última década del siglo veinte. -Fue uno de los acontecimientos más importantes en mi vida que he tenido; representábamos al FMLN histórico, o sea, fuimos los que nos rompimos la madre en el campo de batalla' -, mencionó el también analista político.
Tras el discurso de ambas partes, lejos de los fusiles, las bombas y la sangre, vendría el momento cumbre donde se rubricaría el cese al fuego en El Salvador.