escribe un mito que tenga coherencia y cohesión con la siguiente introducción: en el principio de todas las cosas las mujeres mandaban y los hombres obedecían
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Al principio todos los hombres creían que las mujeres eran todo poder por ser quienes traían vida al mundo, así que los hombres les obedecían sin chistar ni protestar. Ellas eran las que intermediaban con los dioses, la tierra y los humanos para que existiera paz, disipaban las guerras, las catástrofes, las hambrunas y todos los males de la tierra y por tanto se creía que los dioses las habían creado y mandando a la tierra para gobernar en su honor.
Pero un día las fuerzas inclementes de la naturaleza empezaron a amenazar con destruirlo todo, las tierras crugian y se estremecían sin descanso, el agua del mar cada vez se veía más cerca y sin importar lo que hicieran las mujeres para intentar calmar a los dioses nada calmaba la tierra que por tantos años habían mantenido en paz; un hombre que aprovecho la situación para revelarse por sentirse oprimido durante toda su vida empezó a hacer sacrificios para calmar a los dioses argumentando que los dioses se habían cansado de que las mujeres tuvieran el control y que era hora de que los hombres tuvieran el poder, muchos lo siguieron pensando en que quizás tenia razón y que era hora de que las mujeres les obedecieran así como ellos lo habían hecho durante tanto tiempo, muchos otros por temor a represarías por parte de los dioses y sus sacerdotisas prefirieron guardar silencio y seguir obedeciendo a las mujeres. El hombre duro haciendo rituales y sacrificios durante 5 días mientras la sacerdotisa intentaba hablar con los dioses, pero sin ninguna respuesta.
Luego de mucho intentar un día el monte donde la sacerdotisa hablaba con los dioses exploto haciendo llover fuego por doquier haciendo entender a los humanos que el momento de las mujeres había terminado, el hombre se hizo el más fuerte y tomo el poder, haciendo que todas y cada una de las mujeres les sirvieran y la que se rehusara moriría, y así la mujer poco a poco perdió su poder y fue obligada a obedecer y solo obedecer.