ES URGENTEEEEEEE
ES URGENTEEEEEEE
Que participación tuvieron los criollos, aborígenes, gauchos y esclavos negros tuvieron en el proceso revolucionario
Respuestas a la pregunta
Respuesta:¿Cuál fue la participación de los esclavos en los acontecimientos que desencadenaron la revolución porteña de 1810? Este interrogante podría extenderse a los indios y a los mestizos, tema complejo que no podemos tratar en estas líneas. La iconografía oficial de los manuales de historia para uso de la enseñanza primaria y secundaria, muestra al pueblo soberano agolpado frente al Cabildo de Buenos Aires el 25 de mayo de 1810, a pesar del fuerte aguacero que cae sobre la Plaza, « el pueblo quiere saber de qué se trata », dice la frase legendaria, generalmente vinculada con los cuadros que plasman ese momento. El « pueblo » de la versión oficial, vestido como « gente decente », muestra una uniformidad de rasgos físicos de tipo europeo, a pesar de que los negros (pero también los mestizos) intervinieron activamente en esos eventos patrióticos. Los miembros de las castas son los grandes olvidados de la revolución, y este texto propone una relectura « negra y parda » de los hechos1.
2 Martha Goldberg y Silvia Mallo : « La población africana en Buenos Aires y su campaña. Formas de v (...)
3 Andrews, George Reid, Afrolatinoamérica, 1800-2000, Iberoamericana, Vervuert, Madrid, 2007, p. 41.
4 Florencia Guzmán, « Africanos en la Argentina. Una reflexión desprevenida », Andes, Salta,n°17, 20 (...)
5 Andrews, op.cit., p. 46.
6 Empleamos la expresión « negros » por ser la que se utiliza en la época. Jamás se habla de « afroa (...)
7 Miguel A. Rosal, “Diversos aspectos relacionados con la esclavitud en el Rio de la Plata a través (...)
8 Sigue siendo una referencia el artículo de Abelardo Levaggi, “La condición jurídica del esclavo en (...)
2Recordemos rápidamente la importancia demográfica de la « gente de color », para utilizar una expresión de la época. En 1778, en que se instaura el virreinato del Rio de la Plata, los negros de Buenos Aires constituyen el 28.4% de la población, porcentaje al cual se suman mulatos, pardos y castas indefinidas2. Hacia 1800, la trata negrera alcanza su punto culminante, desde la supresión por España de las restricciones al tráfico en 17893. Buenos Aires se convierte en un puerto de amplia circulación negrera, y paradójicamente, esta africanización se desarrolla pocos años antes de la abolición de ese comercio humano - en 1810, 18 buques entran en el Rio de la Plata4. Nuevas naciones, como las originarias de Mozambique, son introducidas en el Rio de la Plata, y entre 1790 y 1806 encontramos registrados en Buenos Aires 4800 esclavos de esa nación, más 4000 originarios de África occidental y 2700 de Congo y Angola5, que se suman a las poblaciones negras que vivían en el puerto desde hacía varias décadas. En Buenos Aires viven también negros libres, cuyo número es superior al de los esclavos6. La ciudad les brinda oportunidades de ascenso social, mediante la adquisición de terrenos, inmuebles y también esclavos, lo cual los convierte en vecinos, como puede verse claramente en los registros de las notarías estudiados por Miguel A. Rosal7. Por otra parte los esclavos pueden rescatarse a si mismos, aún cuando el amo no esté de acuerdo8.
3Durante la segunda mitad del XVIII el crecimiento demográfico de Buenos Aires es el más fuerte de todo el continente, no sólo debido a la introducción de esclavos (legales e ilegales) sino también a causa de las migraciones diversas, de españoles, de europeos y de habitantes del Alto Perú, de Paraguay, Cuyo, y Córdoba, oleadas que aumentan el número de forasteros y en particular los procedentes de las « provincias de arriba » (es decir del Alto Perú, hoy República de Bolivia, región integrada en el virreinato del Rio de la Plata). Según una queja del Síndico procurador en 1791, los « arribeños », en su mayoría mestizos, son « la polilla de los pueblos » y este funcionario pide al virrey que no autorice el ingreso de migrantes de aquellas regiones. De ahi que para los extranjeros que visitan Buenos Aires, los habitantes sean percibidos como amestizados.