Enumere tres (3) situaciones que se convirtieron en obstáculos para la independencia de la Nueva Granada.
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El Virreinato de la Nueva Granada logró un notable crecimiento económico durante la segunda mitad del siglo XVIII, que se frenó desde 1808 con el colapso de España a causa de la invasión y la guerra contra la fuerzas de Napoleón. El crecimiento luego se tornó negativo debido a la interrupción del comercio, las cruentas guerras de Independencia, la decadencia del esclavismo y el estancamiento del comercio internacional, hasta 1850. La inexperta burocracia criolla que remplazó a la de la Corona no tenía capacidad para solucionar los problemas; de modo que la Independencia inauguró un largo proceso de inestabilidad política que resultó muy costoso para la sociedad, aunque se inició una serie de reformas fiscales y legales que empezaron a modernizar la economía de la nueva república independiente.
El proceso de la Independencia produjo entonces costos y beneficios, en contra de la visión sesgada y unilateral de los criollos de la época y de los historiadores tradicionales, para quienes la Colonia fue un período de atraso económico y de oprobio político, y la emancipación el preámbulo de una historia republicana lineal y progresista (Ocampo López, 2007, 201). De acuerdo con otros autores, la Independencia, en cambio, no dio lugar a nada nuevo y el sistema político que se construyó cambió poco y constituyó un prolongado fracaso histórico (Tovar, 2007a, 218).
En este trabajo nos proponemos demostrar que el período colonial fue más próspero de lo que supone la literatura tradicional y que la economía se contrajo en la primera mitad del siglo XIX para recuperarse más adelante. Además, que los criollos no tenían una experiencia de gobierno proto-nacional que les permitiera reorganizar el orden político después de la emancipación y que, a pesar de estar profundamente divididos con respecto a la forma de organización que debía adoptar la república, modernizaron tortuosamente las instituciones políticas y legales heredadas.
La república fue surgiendo difícilmente a partir de su legado absolutista y confesional. Los beneficios, que fueron menos tangibles al comienzo y se fueron asentando con el tiempo, integraban los siguientes elementos: una reducción apreciable de los impuestos, incluida la eliminación del diezmo eclesiástico; una modernización de las constituciones y del código civil; la liberación de los esclavos; la profundización de un mercado de tierras; la modernización de la legislación comercial, bancaria, de sociedades y de pesas y medidas; la abolición del monopolio del comercio, de los estancos y del crédito, que era detentado por la Iglesia, lo que hizo posible la aparición de bancos modernos y privados. Pero el establecimiento de un sistema político menos conflictivo que el que existió durante el siglo XIX sólo fue posible, y no del todo, después de la muy cruenta Guerra de los Mil Días, ya en el siglo XX.
La globalización no estaba madura en el tiempo de la Independencia, y cuando se desató con gran fuerza, después de 1850, Colombia estaba demasiado ensimismada en sus conflictos internos y encerrada dentro de su escarpada geografía como para tomar plena ventaja de la expansión del comercio mundial, aunque es os dos hechos se combinaron y reforzaron intrínsecamente: el conflicto político impidió el progreso económico y el fortalecimiento del Estado, de modo que los recursos se destinaban a la guerra y no a la construcción de una infraestructura que derrotara a la geografía, algo que sí se pudo acometer con éxito en el siglo XX. No obstante, Colombia alcanzó a beneficiarse de un comercio creciente, bastante volátil por cierto, en la segunda mitad del siglo XIX, que contribuyó a reanudar el crecimiento económico sobre una base más amplia que aquella permisible bajo la égida del imperio español y de sus arcaicas relaciones de castas y corporaciones.
Además de estos párrafos de introducción, el ensayo consta de una sección sobre los antecedentes económicos de la Independencia y una sobre las constituciones localistas hasta la Constitución de la Gran Colombia en 1821; la tercera examina el desmonte de la estructura económica colonial, y la cuarta discute los costos y beneficios de la Independencia en términos económicos y políticos; termina con una breve conclusión.