. Entre la variedad de funciones que se le atribuyen a los componentes de la membrana está la que permite el reconocimiento entre las células. No sólo las células que conforman un tejido deben reconocerse, sino también células que han envejecido. Esta situación la viven periódicamente (cada 120 días) los glóbulos rojos humanos; que son reconocidos por macrófagos del hígado, bazo y médula ósea. Para estudiar el factor que permite el reconocimiento entre estas células se inició el análisis experimental de ambas superficies y se detectó que los glóbulos rojos desde el momento que salen a la circulación sanguínea empiezan a perder un azúcar (ácido siálico) desde la superficie celular. El ácido siálico ocupa la posición terminal de una glicoproteína compleja, cuya composición incluye: N-acetilglucosamina, glucosamina, galactosa y ácido siálico (todos monosacáridos).Experimentalmente se midió el índice de fagocitosis de células incubadas con glóbulos rojos, en las condiciones que se muestran en la tabla siguiente
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no sé la verdad perdoname
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