ensayo sobre los 30 años conservadores de Nicaragua
Respuestas a la pregunta
te paso lo q dice una paguina:
El período de los Treinta Años Conservadores y la salud pública.-
En 1857, al finalizar el episodio bélico de Guerra Nacional, los dos principales
caudillos nicaragüenses, Máximo Jerez y Tomás Martínez, suscribieron un acuerdo
político que dio lugar a un gobierno bipartidista de transición y a la posterior puesta en
vigencia de la Constitución de 1858, que proporcionó el marco jurídico para emprender
la tarea de organizar el Estado nicaragüense.
La Carta Magna de 1858 creo la base sobre la que se sostuvo la república
Conservadora de los Treinta Años hasta su colapso en 1893. Este régimen constituye
un caso excepcional en la historia de Nicaragua por el relativo grado de estabilidad
alcanzado en el país en este período.
El régimen de los Treinta Años se organizó en concordancia con el estilo
tradicional “paternalista-autoritario del poder promovido y reproducido por las elites
conservadoras granadinas. Este estilo se expresaba en tres normas de conducta
básicas:”sujeción al orden establecido, obediencia a la jerarquía eclesiástica o seglar, y
Álvarez Montalván, Emilio. Cultura Política Nicaragüense. Managua: Hispamer, 2000 p.122
Aunque la mayoría de estos presidentes pertenecían a las principales familias de
la oligarquía granadina, destacadas figuras políticas de otras ciudades también ocuparon
ministerios o magistraturas en el poder judicial. Este hecho reflejaba el consenso
alrededor de la idea de que el fortalecimiento del Estado era un requisito para garantizar
el orden social, impulsar la agroexportación y alcanzar el progreso.
De ahí que, el objetivo central que se propusieron los gobiernos de la primera
parte del período de los Treinta Años fue poner freno al “desborde social” que de
acuerdo al pensamiento político de las élites granadinas, había sido causado por la
aplicación de la doctrina liberal después de la independencia.
Para ello, el pensamiento conservador propuso y estableció una rígida
estratificación social, que se tradujo en una distribución profundamente desigual de
obligaciones y derechos.; la cual fue codificada y legalizada en la Carta Magna de 1858,
que estableció requisitos de riqueza y propiedad para alcanzar el status de ciudadano, así
como para optar a los principales cargos dentro de la estructura; además otorgó al
Presidente de la República el control sobre las fuerzas armadas, y aumentó su mandato a
cuatro años.
Pérez Baltodano en su obra, “Entre el Estado Conquistador y el Estado Nación”,
señala que la codificación del orden social impulsada por los gobiernos de los Treinta
años, era congruente con su visión conservadora de la ley como un instrumento de
control social, diseñado para legitimar las estructuras de poder existentes. En este
sentido, la obediencia absoluta a las leyes del Estado era considerada por el partido
gobernante como la fuente del orden social-que era sinónimo de tranquilidad”2
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