en que se baso la enconomia del antiguo regimen ?
Respuestas a la pregunta
El retroceso de los últimos glaciares, hace entre 10.000 y 12.000 años, introdujo una serie de cambios geográficos y climáticos que supusieron, a su vez, una transformación en los modos de vida de nuestros antepasados y el comienzo de una nueva era conocida como Holoceno en la que nos encontramos actualmente. La llegada de un mejor clima, sobre todo en Eurasia y América del Norte, supuso la extinción de una fauna que hasta aquel entonces había constituido la base fundamental de la dieta de nuestros ancestros a finales del Paleolítico. Tanto el rinoceronte lanudo como el mamut se extinguieron; el reno se vio obligado a emigrar al norte; y en las zonas de Asia Central y África, cuyas zonas se volvieron, los grupos humanos se vieron obligados a emigrar o adaptarse al nuevo medio. Aparecieron enormes bosques en las cercanías de los Alpes, así como en las zonas altas del extremo oriental del Mediterráneo donde se originaron grandes extensiones de hierba.
Aproximadamente 4.500 años después de la retirada del último glaciar (Würm), se puede contemplar un gran desarrollo a nivel tecnológico en las zonas de Próximo Oriente y Medio Oriente. Los utensilios de sílex, así como elementos artísticos y de carácter religioso, se hicieron cada vez más complejos y elaborados. La piedra tallada fue progresivamente sustituida por la piedra pulimentada. Es justo en este preciso momento cuando podemos empezar a hablar del término Neolítico o “piedra nueva”. No obstante, los hitos que marcaron dicho periodo prehistórico fueron el descubrimiento de la agricultura y la domesticación de los animales. No se sabe con certeza cuando sucedieron dichos acontecimientos ni donde. Tampoco se sabe si se produjeron a la vez o en momentos distintos. A pesar de todo, se ha mantenido la hipótesis de que los testimonios más antiguos de dichos procesos se encontrarían en el llamado Creciente Fértil, el espacio que se encuentra en la costa oriental del Mediterráneo, se extiende por los montes de Siria e Irak, y prosigue por los valles de los ríos Tigris y Éufrates hasta llegar al golfo Pérsico.