¿En qué medida resulta negativo para el hombre el aumento vertiginoso de la velocidad en la transmisión de la información? elaboren dos ejemplos
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
. Campos de aplicación de las tecnologías de la información
Este es el mundo en que vivimos... muy diferente, tal vez, de aquél en que vivieron
nuestros abuelos. La Tecnología es en parte responsable de que nuestro planeta esté
tal como está... para bien y para mal.
¿Cómo ha afectado a la humanidad el aporte de los avances tecnológicos?... No
cabe duda de que durante el último siglo se produjeron grandes logros en este
campo: el aprovechamiento de nuevas fuentes de energía, la creación de incontables
herramientas, grandes victorias en la lucha contra las enfermedades, la posibilidad
de comunicarnos en forma inmediata con otras personas... y la incorporación de la
tecnología a la educación.
3.2. Impacto social de las nuevas tecnologías
Las tecnologías de la información y la comunicación han invadido absolutamente todas
las actividades del hombre actual, modi cando sustancialmente nuestra cosmovisión.
A propósito de este tema, la ya citada autora Gabriela Cicalese explica muy bien en su
libro los cambios en nuestra percepción del mundo.
Transcribiremos a continuación las ideas más importantes:
La velocidad
Desde principios del siglo XIX, cuando los adelantos tecnológicos comenzaron a
sucederse, el tiempo fue considerado un obstáculo al que la tecnología debía vencer.
Aquella gran barrera que el telégrafo lograría superar, casi un siglo más tarde, permitiendo que
la información corriera más rápido que los movi mientos humanos, se multiplica hoy con las
posibilidades que propor cionan las nuevas tecnologías (velocidad de los microprocesadores,
avan ce de los mecanismos de interconexión, satélite, bra óptica, etc.).
52 • Unidad 3. Gestión de las tecnologías
En la actualidad, la información aparece indiscriminadamen te, dirigida a nadie en
particular, a velocidades muy altas, en gran canti dad y sin ningún orden ni sentido.
Compartimos informaciones de acci dentes con el horóscopo, estrenos de espectáculos
con escándalos políti cos, estado del tiempo o de rutas junto a noticias policiales y
novedades de productos o costumbres para consumir. Todo ello sin intervalos, sin
respiros, a un ritmo cada vez más vertiginoso. La información ya no sólo es más rápida
que los movimientos humanos; también es más rápida que los pensamientos.
Está planteada vertiginosamente. Los hechos cambian más rápido que nuestra
adaptación a ellos. Si antes el tiempo era un obstáculo a vencer, hoy la rapidez
exagerada también se ha convertido en un obstáculo. Nos hace falta tiempo. Los datos
están almacenados, se nos aparecen, se nos imponen. No “hacemos a tiempo” para
conectarnos con ellos.
La rapidez lleva, entonces, a otro gran problema, que es el de la SATURA CIÓN de
INFORMACIÓN. La información desborda la capacidad de in terpretación y se convierte
en datos descartables.
En la televisión actual, por ejemplo, existen programas que usan imágenes editadas
y sobrepuestas, cortinas musicales variadas y cambiantes, personas que hablan
aceleradamente en un tono elevado, etc., todo a gran velocidad y simultáneamente. Si
grabáramos alguno de estos programas, y luego los volviéramos a mirar cuidadosamente,
nos daríamos cuenta de cuánta información se perdió en la primera percepción, que es
la que realizamos a diario. Esto se debe a que la velocidad supera nuestra capacidad de
captación.
Pero la velocidad no es sólo una característica de la información. También afectó, por
ejemplo, a los transportes: los trenes de alta velocidad que impiden percibir el paisaje
cercano mientras transitamos en ellos; los aviones que parecen “achicar” las distancias
porque nos permiten recorrerlas más rápidamente, la infraestructura de autopistas de
gran velocidad, el desarrollo de la industria automotriz, etc.
Explicación: