En qué lugar Hernán Cortés quiso iniciar la evangelización y que consejo siguió
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Explicación:
demás de tener los valores de un guerrero de su época, Hernán Cortés era al mismo tiempo un varón piadoso y un ferviente católico, es decir, en él la guerra y la religión estaban íntimamente unidas. Esta actitud explica la relación tan cercana que tuvo con los religiosos, así como la visión que éstos dejaron de él en sus crónicas.
Parecería contradictorio que un hombre de armas como Hernán Cortés, imbuido de los valores guerreros como el arrojo, la valentía, el gusto por el fragor de la batalla y por derramar sangre, fuera al mismo tiempo un varón piadoso y un ferviente católico preocupado por la salvación de su alma y por la de sus semejantes. Pero esto no era raro en una sociedad como la medieval y mucho menos en Castilla, donde varios siglos de lucha contra los musulmanes habían generado una ideología en la cual la guerra y la religión estaban íntimamente unidas. El triunfo final sobre los infieles con la toma de Granada en 1492, el mismo año que Colón llegaba a América, era considerado como un hecho providencial; Dios premiaba a los castellanos con un continente lleno de riquezas por haber luchado contra los enemigos de la fe, pero el premio traía consigo la obligación de convertir a las almas de los indios al cristianismo.