En qué consiste la sabiduría del ciego en la obra lazarillo de tormes
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Su principal sabiduria fue el conocimiento de las artes del engaño para subsistir. Durante todo el tiempo que estuvo Lazarillo con este (quien fue su primer amo), aprendió, a ser astuto, y pícaro. Todo este conocimiento forjó el carácter del chico y lo preparó para manejar de mejor manera a sus siguientes amos en la secuencia de la historia.
Explicación:
La obra, cuyo nombre completo es “La vida de Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades” es una novela española de autor anónimo. Sin embargo desde el año 2010, algunos estudiosos de la materia, han comenzado a atribuirle su autoría al escritor español Diego Hurtado de Mendoza. Esta obra, precursora de la novela picaresca, narra las aventuras y desventuras de Lázaro González Pérez. En esta novela, Lázaro es hijo de Tomé González y Antona Pérez, empleado del molino del pueblo y ama de casa, respectivamente. El apelativo de Lazarillo de Tormes proviene del hecho de haber nacido junto al río de este mismo nombre.
A la muerte de su padre y ante la incapacidad de su madre para alimentarlo, Lázaro es entregado a diferentes amos para que se encarguen de su educación y alimentación. En retribución, el debe servirles en todo lo que ellos consideren necesario. En el curso de la historia, el niño llega a tener hasta 9 amos diferentes. De cada uno de ellos aprende a defenderse de los rasgos negativos de las personas. Estos rasgos eran, justamente la característica negativa principal que caracterizaba a cada sus amos. El ciego fue el primero de ellos.
Con el ciego, Lázaro aprende a ser hábil en todo tipo de trampas y malicias para sustraer dinero y alimentos que él le negaba. Cada vez que el ciego descubría sus artimañas, el niño Lázaro era castigado cruelmente. Esta situación lo llevó a planificar una venganza luego de la cual escapó y pasó al servicio de un segundo amo. De allí en adelante prosigue la historia. Eventualmente, y luego de una serie de aventuras, Lázaro González Pérez termina casándose con la criada de su último amo, el arcipreste de San Salvador.