Historia, pregunta formulada por dylay367gacha, hace 16 horas

̈En la ciudad capital llamaban la atención las grandes mansiones de la gente
adinerada, de los nobles. Junto con los edificios públicos, las iglesias y conventos
constituían la riqueza arquitectónica de que se vanagloriaban los citadinos y que
admiraban los visitantes. Por lo general, la mayoría de los dueños de estas
mansiones eran ricos hacendados y pudientes mineros, visitantes temporaleros de
sus propiedades, pero radicados en la ciudad, desde donde controlaban con eficacia
el crecimiento de sus riquezas. La vida en la capital propiciaba el contacto entre
familias, dando lugar al cumplimiento de los rituales que mantenían la continuidad
de su identidad como grupo: misas de gallo, tertulias, bailes, comilonas y
reuniones de salón, donde, entre el frufrú de las sedas y el vuelo de los abanicos
tejían las alianzas matrimoniales y la diversificación de las inversiones. Entre la zona
donde se ubicaban estos fastuosos edificios y los alrededores de la ciudad se daba
un gran contraste. En sus límites, donde empezaba a deshilacharse el urdido tapete
de la traza, se congregaba la población indígena. En sus barrios predominaba el
jacal de adobe con una sola pieza. Ahí la ciudad hacía caso omiso del decoro, y las
calles, las plazas y los mercados florecían sin planeación. "Hasta 2000 indios no
residentes entraban diariamente a la ciudad para realizar sus negocios y gozar de
placeres. La plazuela del Volador era el lugar favorito de reunión de los campesinos
indígenas, muchos de los cuales se embriagaban". Costumbre adquirida después
30 de ser conquistados, cuando también aprendieron a participar de las procesiones y de los carnavales, de los que más tarde serian separados. Otros grupos sociales
que no pertenecían ni a la élite ni a los pueblos de indios, habitaron las zonas
cercanas a la periferia. "Detrás de los hermosos palacios de rojo tezontle y gris
piedra chiluca fueron apareciendo las casas de la gente de medio pasar, las
accesorias y vecindades [de los] artesanos, empleados, pequeños mercaderes,
jornaleros y los numerosos pobres que hacían de la limosna su oficio". En la ciudad,
también ahí donde se diluía la traza, en los barrios, "no faltaban nunca, multitud de
pequeños espectáculos callejeros del agrado del pueblo: maromas, títeres,
[exhibición] de animales exóticos, fuegos ilíricos, mujeres y niños deformes,
máquinas de hombre invisible; "Diversiones todas, que debían contar con la
aprobación del ayuntamiento, que las limitaba sólo por temor a los excesos. Así, en
la calle, en las plazas, donde la vida citadina era el espectáculo por excelencia, la
representación jerarquizaba papeles principales y de comparsa, bien como drama,
bien como comedia.


Con base en la lectura, reflexiona acerca de las siguientes preguntas:
-¿Puedes notar las diferencias sociales y los lugares que habitaban, que se
describen en la lectura?
-Describe las actividades que realizaban las personas, de acuerdo a su clase social.
-¿Qué festividades o diversiones se mencionan en la descripción de la lectura?

-¿Qué cosas de las que se describen en la lectura, se siguen viendo en tu ciudad o
comunidad como parte de la vida cotidiana de la sociedad?

solo contesten los k saben

Respuestas a la pregunta

Contestado por nidiagarcia1
1

Respuesta:

maromas, títeres,

[exhibición] de animales exóticos, fuegos ilíricos, mujeres y niños deformes,

máquinas de hombre invisible;

Explicación:

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