elementos que debe tener un estado para grantizar una igualdad social
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Igualdad económica, social y cultural
Los ciudadanos tienen que tener igualdad de condiciones y de trato. Incluyen el derecho a ser empleados, el derecho a la vivienda, a la educación y a la salud, así como la seguridad social y las prestaciones por desempleo.
Explicación:
Respuesta:
Como pudimos observar la igualdad consiste en garantizar las mismas oportunidades y condiciones a mujeres y hombres.
...
Los objetivos de la PNI buscan garantizar la igualdad en:
La vida económica.
La participación y representación política.
Acceso y pleno disfrute de los derechos sociales.
En la vida civil.
En la vida cultural
En ¿Qué Estado para qué igualdad? se aborda con
especial énfasis el trabajo de las mujeres, que va de
la mano de varios ámbitos que conducen y regulan su
vida. Primero es importante señalar que el trabajo de
las mujeres tiene dos caras: el trabajo remunerado y el
trabajo no remunerado, sobre todo el trabajo doméstico
y de cuidado. Para que la mujer se inserte en pie de
igualdad con el hombre en el trabajo remunerado de
la sociedad, se requiere aliviar la carga de trabajo no
remunerado que pesa sobre sus hombros. Para lograr
la igualdad, también es necesario que las mujeres
participen plenamente de la vida política de sus países,
es decir, en todos los niveles de toma de decisión, y que
tengan una vida libre de violencia, donde se respete
su cuerpo y puedan decidir libremente acerca de la
reproducción.
Las tres dimensiones propuestas por el Observatorio
de igualdad de género de América Latina y el Caribe
—autonomía económica, autonomía en la toma de
decisiones y autonomía física— se recogen en este
documento para analizar el papel del Estado en el
desarrollo de los países basado en la igualdad2
. La mirada
del documento se centra en cómo deben abordarse estos
tres ámbitos para lograr la igualdad en el trabajo de las
mujeres con respecto a los hombres.
La principal propuesta que se deriva del análisis
de este estudio es la articulación de un nuevo pacto
social y fiscal para la redistribución del trabajo total
entre hombres y mujeres, incluida la adopción de todas
las medidas necesarias por parte del Estado —ya sean
legislativas, institucionales, educativas, sanitarias,
fiscales y de participación de las mujeres en la toma de
decisiones— con el propósito de eliminar los sesgos de
género en el mercado laboral y superar la brecha salarial,
la segmentación y la discriminación. Para que hombres
y mujeres puedan compartir derechos y obligaciones
en la vida pública y privada es necesario que el Estado,
el mercado y las familias asuman un nuevo papel en el
cuidado de las personas, que incluye la corresponsabilidad
entre hombres y mujeres y la implementación de nuevos
tipos de servicios y nuevas formas de organización de la
vida cotidiana y de los organismos públicos y privados que
deben ser orientados a través de las políticas públicas