elementos de un dilema moral
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Enumerar opciones alternativas. Todo dilema moral obliga a elegir una opción de entre las dos que se abren. ...
Argumentar en favor de cada opción. ...
Análisis del problema. ...
Solución.
Explicación:
espero haberte ayudado corona por fa
Respuesta:
Enumerar opciones alternativas.
Todo dilema moral obliga a elegir una opción de entre las dos que se abren. Pero a veces es posible evitar el dilema buscando soluciones alternativas. Esta búsqueda de alternativas favorece la capacidad de encontrar otras soluciones y evitar el dilema.
Argumentar en favor de cada opción.
Para tomar una decisión tenemos que buscar los argumentos que están a favor de cada una de las dos opciones que se nos presentan. No sirve cualquier argumento, sino sólo aquellos que pueden justificar moralmente lo que hacemos. Si alguien nos pregunta por qué hemos pegado a un compañero en clase, podemos responder que ha sido porque le odiamos; es sin duda una explicación, pero es muy difícil que alguien considere que nuestra acción está justificada con esa explicación. Explicar por qué hacemos las cosas no es lo mismo que justificarlas.
En el caso del dilema, el problema consiste en que hay argumentos a favor de cada una de las opciones. Para poder tomar una decisión bien justificada es muy importante que tengamos en cuenta los diversos argumentos, y no solo los que hay a favor de la opción que, en principio, nos parece buena, sino también los que hay a favor de la otra opción.
Los argumentos que se suelen emplear en la argumentación moral son, en general, de dos tipos: consecuencias y principios o valores.
Entendemos por consecuencias los resultados que generan nuestras decisiones, ya sean estos perniciosos o favorables. Actuamos para conseguir algo, y lo que obtenemos es una consecuencia de nuestra acción. Además, al actuar incidimos en nosotros mismos y en los que nos rodean, de tal modo que además de la consecuencia directa e inmediata hay otras más indirectas, pero que también importan. Y, con frecuencia, al mismo tiempo hay consecuencias positivas y negativas para uno mismo y para los demás, por lo que pueden entrar en conflicto y por eso tenemos un dilema.
Los principios son los supuestos, creencias o normas fundamentales que guían nuestro comportamiento. Por otra parte, los valores nos indican lo que apreciamos en esta vida y consideramos fundamental para lograr una vida que merezca la pena.
En este ejercicio te pedimos que enumeres el mayor número de argumentos posibles a favor de cada una de las opciones.
Análisis del problema.
Al actuar tenemos en cuenta los valores morales, es decir, nos preocupa saber si lo que hacemos está bien o está mal. Cuando hacemos lo que está bien nos sentimos satisfechos; cuando hacemos lo que está mal nos sentimos culpables y avergonzados. Considerados desde otro punto de vista, los valores morales nos imponen una conducta a través de nuestra conciencia moral. Esta nos dice lo que es bueno y debemos hacer, así como lo que es malo y no debemos hacer.
Además, cuando actuamos, vamos buscando conseguir algo que consideramos bueno, que es importante y valioso para nosotros y de lo cual depende nuestra felicidad.
Los dilemas morales se caracterizan porque son situaciones en las que estamos obligados a tomar una decisión, pero nos damos cuenta de que existen varios principios morales en juego y también varios bienes o cosas valiosas y que no es posible atenderlos todos. Si hacemos una cosa, actuamos de acuerdo con un valor moral y conseguimos algo, pero al mismo tiempo incumplimos otro valor moral y perdemos otra cosa. No hay forma de satisfacer los dos valores o principios en juego y nos vemos obligados a elegir. El primer paso para hacer frente a un dilema consiste, por tanto, en darse cuenta de los valores y principios morales que están en conflicto. Para ello, debemos tener en cuenta, en primer lugar, lo que nos dice nuestra propia conciencia. Además debemos ser conscientes de los valores que están vigentes en la sociedad en la que vivimos, valores que algunas veces son muy explícitos y están bien definidos, como ocurre en códigos morales del tipo de los Diez Mandamientos o de los Derechos Humanos. Es además, importante, tener en cuenta la importancia que tienen para nosotros y el orden jerárquico en el los situamos. También debemos saber la clase de persona que queremos ser y la clase de mundo en la que queremos vivir.
Solución.
Al final hay que explicar lo que uno mismo haría en el caso de encontrarse en una situación semejante. Para ello hay que hacer una redacción en la que dejemos claro qué es lo que pensamos que se debe hacer y cuáles son las razones que justifican nuestra decisión. Es decir, se trata de exponer la decisión que hemos tomado, basándonos en los argumentos expuestos en la pregunta anterior, procurando además refutar los argumentos que están en contra de lo que nosotros pensamos que es la conducta moralmente buena. Es muy importante no tratar de resolver el dilema proponiendo una solución intermedia con la que se intenten satisfacer los valores que están conflicto. En ese caso estaríamos evitando el dilema y no dando nuestra solución. Por tanto, la decisión que ofrezcamos en este apartado tiene que ser una de las dos que plantea el dilema.