elabora un texto argumentativo sobre
La Calidad de vida de la Población Peruana a Partir de los Servicios Básicos de
Agua Potable y Alumbrado Eléctrico.
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El agua y la energía están intrínsecamente interconectadas. Todas las fuentes de energía (incluida la electricidad) requieren del agua en sus procesos de producción: para la extracción de materias primas, la refrigeración de plantas térmicas, los procesos de limpieza, la producción de biocombustibles y para el funcionamiento de las turbinas. Se requiere de la energía para que se pueda disponer de agua para uso y consumo humano (incluyendo el riego) a través del bombeo, transporte, tratamiento y desalación.
La forma en que la sociedad entiende la gestión conjunta de los recursos hídricos y energéticos se ha desarrollado con el tiempo. Esta relación, tal y como se define hoy en día, se puede considerar que es simplemente cuál es la intensidad energética en el sector del agua y cuál es la intensidad del agua en el sector de la energía. Esto es, la cantidad de agua necesaria, directa o indirectamente, para la exploración, la extracción, la generación y la transmisión de la energía, y la cantidad de energía necesaria para la extracción, el transporte, la distribución, la recogida, el tratamiento y el uso final del agua. El nexo agua-energía fue acuñado como un área de estudio separada dentro del concepto del nexo con el fin de analizar las interdependencias y las complejidades específicas en la relación entre el agua y la energía. La dependencia que tiene el agua del sector energético y la dependencia del sector energético del agua gira en torno a cuestiones elementales como son los sistemas de gestión del agua y de infraestructuras o la energía sostenible y la eficiencia de los sistemas.
El desarrollo integrado, y no de forma aislada, de las políticas hídricas y energéticas es de suma importancia. Con los altos riesgos a los que el sector energético está ahora expuesto, la inclusión del agua en sus planes estratégicos resulta más esencial que nunca.
Agua para la Energía
La disponibilidad de energía es el pilar para el progreso social y económico de una sociedad. El agua resulta clave para el desarrollo de las infraestructuras energéticas y sigue siendo fundamental en todo el ciclo de vida de las infraestructuras energéticas y el desarrollo de dichos recursos, desde la extracción de combustibles, su purificación, lavado y tratamiento, como refrigerante en las centrales nucleares o térmicas, o para las plantas de energía hidroeléctrica (como “combustible”) o en la producción de biocombustibles (agua de riego).
Energía para el Agua
La energía tiene una importancia primordial para la gestión y el desarrollo de los recursos hídricos. Las infraestructuras del agua dependen por completo de la energía a lo largo de su cadena de valor, desde el bombeo de aguas subterráneas, el transporte, la purificación del agua, la desalación, la distribución del agua a los usos económicos y a la población hasta la recogida, la gestión y el tratamiento de las aguas residuales.
¿Sabías que…?
1.300 millones de personas no tienen acceso a la electricidad o no disponen de un acceso fiable.
Como tendencia general, es probable que aumente el consumo de la energía y electricidad en los próximos 25 años en todas las regiones del mundo, con un mayor incremento en los países no pertenecientes a la OCDE.
Para 2035, el consumo de energía habrá aumentado en un 35%, lo que conllevará que el consumo de agua por parte del sector aumente en un 85%.
La energía hidroeléctrica suministra alrededor del 20% de la electricidad mundial, proporción que se ha mantenido estable desde la década de los 90.
Los requerimientos de energía para el bombeo de agua superficial son generalmente un 30% menores que para el bombeo de las aguas subterráneas. Se espera que el agua subterránea utilice cada vez más energía al estar bajando los niveles freáticos en las distintas regiones del mundo.
A nivel mundial, se estima que el agua de riego destinada a la producción de biocombustibles es de 44 km3, el 2% de toda el agua de riego. En las condiciones actuales de producción, se necesita un promedio de alrededor de 2.500 litros de agua (unos 820 litros de agua de riego) para producir 1 litro de biocombustible líquido (la misma cantidad que se necesita, en promedio, para producir alimentos para una persona durante un día).
Fuentes: Informe de las Naciones Unidas sobre el desarrollo de los recursos hídricos en el mundo 4. Volumen 1: Gestionar el agua en un contexto de incertidumbre y riesgo. WWAP, 2012 Informe de las Naciones Unidas sobre el desarrollo de los recursos hídricos en el mundo 3. El agua en un mundo en constante cambio. WWAP, 2009. Iniciativa Energía Sedienta del Banco Mundial, 2014
Respuesta:
En el caso concreto de Perú, el estudio le otorga un índice de calidad de vida digital de 0.42 sobre 1, lo que lleva al país a ocupar la posición 72, por detrás de países como Colombia (62), Chile (60) y Brasil (58).
Explicación: