EL PRIMO LYMON
Miss Amelia miró hacia el camino en silencio. Un perro de las casas del camino comenzó a ladrar furiosamente, luego se oyó una voz que le hizo callar. No vieron con claridad lo que llegaba por el camino hasta que la forma estuvo a su lado. En la franja de luz amarilla del pasillo.
Era un forastero, y no es frecuente que los forasteros entren en el pueblo a pie a tales horas. Además, aquel hombre era jorobado. No mediría más allá de cuatro pies de altura y llevaba un abrigo andrajoso y lleno de polvo, que apenas le llegaba a las rodillas. Sus piernecillas torcidas parecían demasiado débiles para soportar el peso de su gran torso deforme y de la joroba posada sobre su espalda. Tenía una cabeza enorme, con unos ojos azules y hundidos y una boquita muy dibujada. En aquel momento su piel pálida estaba amarilla de polvo y tenía sombras azules bajo los ojos. Llevaba una maleta desvencijada, atada con una cuerda.
-… buenas –dijo el jorobado jadeando.
Miss Amelia y los hombres del pasillo no contestaron a su saludo ni dijeron una palabra. Se quedaron mirándole sin más.
- Voy buscando a doña Amelia Evans.
- Miss Amelia se echó hacia atrás el mechón de la frente y levantó la barbilla:
- ¿por qué?- preguntó.
- Pues porque soy pariente suyo contestó el jorobado.
1.En la oración : “luego se oyó una voz que le hizo callar” , el pronombre le se refiere a:
a. Miss Amelia b.
El primo lymon
c. El perro
d. Un forastero
Respuestas a la pregunta
EL PRIMO LYMON
Miss Amelia miró hacia el camino en silencio. Un perro de las casas del camino comenzó a ladrar furiosamente, luego se oyó una voz que le hizo callar. No vieron con claridad lo que llegaba por el camino hasta que la forma estuvo a su lado. En la franja de luz amarilla del pasillo.
Era un forastero, y no es frecuente que los forasteros entren en el pueblo a pie a tales horas. Además, aquel hombre era jorobado. No mediría más allá de cuatro pies de altura y llevaba un abrigo andrajoso y lleno de polvo, que apenas le llegaba a las rodillas. Sus piernecillas torcidas parecían demasiado débiles para soportar el peso de su gran torso deforme y de la joroba posada sobre su espalda. Tenía una cabeza enorme, con unos ojos azules y hundidos y una boquita muy dibujada. En aquel momento su piel pálida estaba amarilla de polvo y tenía sombras azules bajo los ojos. Llevaba una maleta desvencijada, atada con una cuerda.
-… buenas –dijo el jorobado jadeando.
Miss Amelia y los hombres del pasillo no contestaron a su saludo ni dijeron una palabra. Se quedaron mirándole sin más.
- Voy buscando a doña Amelia Evans.
- Miss Amelia se echó hacia atrás el mechón de la frente y levantó la barbilla:
- ¿por qué?- preguntó.
- Pues porque soy pariente suyo contestó el jorobado.
1.En la oración : “luego se oyó una voz que le hizo callar” , el pronombre le se refiere a:
a. Miss Amelia b.
El primo lymon
c. El perro
d. Un forastero