¿El Control de la evaluación del paciente, este manifiesta un empeoramiento de los niveles de función gastrointestinales, y alteraciones de las enzimas hepáticas? ¿Qué relación tiene esta alteración con el sulfato ferroso, que se debe hacer en este caso? Consulta y explica la respuesta
Respuestas a la pregunta
En la evaluación de un paciente aparecen alteraciones de las funciones gastrointestinal y de las enzimas hepáticas, existe relación con el consumo excesivo o inadecuado de sulfato ferroso, ya que puede ocasionar trastornos digestivos y alterar la función hepática, debiéndose suspender su administración en este caso.
¿Qué es el sulfato ferroso y que alteraciones puede ocasionar?
El sulfato ferroso es un suplemento dietético necesario para mantener o compensar la cantidad de hierro presente en la hemoglobina, necesaria para el transporte de oxígeno en la sangre.
Dentro de los efectos adversos en la administración del sulfato ferroso están la aparición de síntomas gastrointestinales y la alteración de la función hepática. Otros efectos incluyen la coloración anormal de la dentadura y la intolerancia a su administración
- Los síntomas gastrointestinales pueden ser: como dolor, ardor, dispepsia, inflamación intestinal, diarrea nauseas y vómitos.
- A nivel hepático puede ocurrir alteración de la función de este ógano, expresado en una elevación de las transaminasas -enzimas hepáticas- e incluso de la bilirrubina. Esto se debe a que el hierro se almacena y metaboliza en el hígado, por lo que su exceso puede producir daño.
¿Qué se debe hacer en este caso?
Al aparecer en un paciente alteraciones gastrointestinales y hepáticas por el consumo de sulfato ferroso, la primera medida consiste en el cese de la administración de este suplemento, además de indicar el tratamiento adecuado a los síntomas y alteraciones que se presenten.