Ejercicios de buerguer allen en la recuperación funcional del pie diabético en pacientes del area de terapia fisica
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
5.1 Ejercicios de Buerger Allen
5.1.1 Definición
Son ejercicios terapéuticos que ayudan a tratar problemas circulatorios periféricos que constan de cambios posicionales de las extremidades y de ejercicios de dorsiflexión y plantiflexión aumentando el flujo sanguíneo de los miembros inferiores posterior a su realización. (12)
Estos ejercicios ayudan a la activar la circulación en miembros inferiores a través de la circulación colateral y se favorece de los cambios posturales al drenar y descongestionar los miembros inferiores.
5.1.2 Historia
La tromboangeítis obliterante más conocida como enfermedad de Leo Buerger, es un padecimiento inflamatorio y obstructivo de los vasos sanguíneos de las extremidades, Leo Buerguer o Leo Büerger (idioma natal) inventó estos ejercicios con el fin de darle tratamiento a personas que padecían de esta enfermedad, los cambios posturales de Buerger se indicaban en un diagnóstico con patología periférica como tromboangeítis, arterioesclerosis. Los ejercicios consistían en mantener las extremidades elevadas, en declive y en posición horizontal y se realizaban cinco minutos cada uno o según el tiempo en que se tardaba en conseguir la decoloración de la piel en la elevación y la eritromelia (más conocida como eritema cutáneo no doloroso que se da en posición de declive). Durante su aplicación, sufrieron cambios que consisten en mantener las posiciones anteriores, pero sumándole movimientos activos con fin de favorecer la circulación sanguínea. (13)
La evolución que tuvieron los ejercicios de Buerguer Allen fue algo positivo, por lo que al agregarle contracciones musculares y resistencia, hace que se active la circulación y en conjunto con la gravedad, pueden ayudar a descongestionar las venas de miembros inferiores.
16
5.1.3 Fundamento
Estos ejercicios se fundamentan en la estimulación y beneficio terapéutico de la hiperemia, ya que los vasos de las extremidades se dilatan haciendo que la circulación en el área aumente, esta se obtiene al momento de ejecutar los ejercicios para mejorar la circulación colateral de miembros inferiores, beneficiándose también de la gravedad ya que ayuda a favorecer el retorno de líquidos y sustancias retenidas en las extremidades.
5.1.4 Dinámica de los ejercicios
Los ejercicios de Buerger Allen son conocidos por sus beneficios porque mejoran la circulación, estos ejercicios constan de tres fases: a) Elevación, b) Declive o descanso y c) Horizontal o de reposo. Cada fase tiende a durar de 1 a 5 cinco minutos, esto dependerá de cada persona según las reacciones que muestre la piel.
a) Fase de elevación
Cosiste en que el paciente se sitúe en una camilla en posición de decúbito supino, sus miembros inferiores se encuentran elevados en posición deplectiva, en un ángulo entre 60 y 80°. El paciente tiene que permanecer en esta posición alrededor de cinco minutos o hasta que haya un cambio de color en la piel de las extremidades principalmente en los dedos de los pies estos deben tornarse pálidos o blanco cadavérico; se debe indicar que en esa posición tiene que realizar ejercicios de flexiones y extensiones de tobillo.
Imagen Núm. 1
Fase de Elevación
Fuente: García, Martínez E. Fisioterapeutas del servicio de salud de la comunidad de Madrid, Temario Volumen III. Editorial MAD, S.L. Madrid. España. 2005. Página 45 y 46.
17
b) Fase de declive o descenso
Esta fase se realiza posterior a la fase de elevación y consiste en que el paciente se sitúe en decúbito sedente con los pies suspendidos en la camilla, durante un tiempo de cinco minutos o hasta que presente signos de eritromelia o rubor en la piel de los pies, se le hace mención que durante ese tiempo él debe realizar movimientos oscilantes de miembros inferiores.
Imagen Núm. 2
Fase de declive o descenso
Fuente: García, Martínez E. Fisioterapeutas del servicio de salud de la comunidad de Madrid, Temario Volumen III. Editorial MAD, S.L. Madrid. España. 2005. Página 45 y 46.
c) Fase horizontal o de reposo
Después de haber realizado la fase de descenso, el paciente debe colocarse de nuevo en posición de decúbito supino en la camilla, con los miembros inferiores extendidos sin ningún tipo de elevación y durante cinco minutos debe realizar dorsiflexión y plantiflexión, interviniendo el terapeuta al resistir la plantiflexión.
18
Imagen Núm. 3
Fase horizontal o reposo
Fuente: García, Martínez E. Fisioterapeutas del servicio de salud de la comunidad de Madrid, Temario Volumen III. Editorial MAD, S.L. Madrid. España. 2005. Página 45 y 46.
Finalmente se repetirán estas tres fases de cinco a seis veces, completando un ciclo de cuarenta y cinco minutos o una hora. (14)
Cabe mencionar que agregarle resistencia a estos ejercicios en sus diferentes fases con accesorios como pelotas y bandas de resistencia, ayudará a aumentar la fuerza muscular mejorando el bombeo sanguíneo.
Explicación: