Efectos que provoca el
Déficit de agua en los
Ecosistemas hídricos
Respuestas a la pregunta
El déficit hídrico, es en pocas palabras, la falta o escasez de agua, por lo que el concepto está muy relacionado con la sequía o la escasez, además, está intimamente ligado con lo que se denomina disponibilidad hídrica, es decir el equilibrio entre la oferta y la demanda de agua en el medio.
A continuación, te explicamos todos los conceptos relacionados con el déficit hídrico, la escasez del agua y sus concecuencias.
Indice de contenidos
Diferencia entre los tres conceptos de escasez del agua
Consecuencias de un desequilibrio entre la oferta y la demanda de agua
Diferencia entre los tres conceptos de escasez del agua
El agua es un bien necesario para el ecosistema natural, por lo que su falta puede originar problemas para todos los seres vivos que habitan en él.
Sin embargo, debemos diferenciar entre aquellas situaciones naturales y sin riesgos (escasez hídrica), de aquellas que pueden suponer un problema (déficit hídrico) y de aquellas otras que son un grave problema (sequía).
Déficit hídrico: es aquella situación en la que el agua disponible no es suficiente para satisfacer la demanda
Escasez hídrica: es un evento natural en el que un río o una zona posee menor cantidad de agua que la esperada por promedios históricos en un momento dato. Es decir, son oscilaciones naturales de la cantidad de agua disponible que varia principalmente por retraso en deshielos u otras causas naturales.
Sequía: es aquella situación en la que existe un déficit hídrico suficiente que provoca daño en la vegetación y limita la producción de los suelos de la zona
Consecuencias de un desequilibrio entre la oferta y la demanda de agua
Las consecuencias pueden ser muy diversas y afectar a diferentes sectores de la sociedad:
Desacuerdos entre los usuarios sobre el uso y la cantidad de agua destinada a cada actividad
Limitación del uso del agua, lo que obligará a modificar los hábitos o estilos de vida.
Estrés hídrico en la vegetación o en los animales por falta de agua. Este es más acusado en la vegetación ya que no tiene la posibilidad de desplazarse para encontrar nuevas fuentes de agua. Se puede llegar a producir importantes pérdidas de seres vivos por migración o por muertes por deshidratación.
Estrés hídrico en el agua existente, ya que esta puede verse sobreexplotada llegando incluso a contaminarse por un uso incorrecto.
Estas dos últimas consecuencias se suelen producir en situaciones de sequía, aunque cualquier situación de desequilibrio, dependiendo de la sensibilidad de medio, puede provocar serias consecuencias.