doy corona quien ponga 5 poemas los mejore que encuentren por fa
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Se equivocó la paloma, de Rafael Alberti
Se equivocó la paloma.
Se equivocaba.
Por ir al Norte, fue al Sur.
Creyó que el trigo era agua.
Se equivocaba.
Creyó que el mar era el cielo;
que la noche la mañana.
Se equivocaba.
Que las estrellas eran rocío;
que la calor, la nevada.
Se equivocaba.
Que tu falda era tu blusa;
que tu corazón su casa.
Se equivocaba.
(Ella se durmió en la orilla.
Tú, en la cumbre de una rama.)
Gacela de la terrible presencia, de Federico García Lorca
Yo quiero que el agua se quede sin cauce.
Yo quiero que el viento se quede sin valles.
Quiero que la noche se quede sin ojos
y mi corazón sin la flor del oro.
Que los bueyes hablen con las grandes hojas
y que la lombriz se muera de sombra.
Que brillen los dientes de la calavera
y los amarillos inunden la seda.
Puedo ver el duelo de la noche herida
luchando enroscada con el mediodía.
Resisto un ocaso de verde veneno
y los arcos rotos donde sufre el tiempo.
Pero no me enseñes tu limpio desnudo
como un negro cactus abierto en los juncos.
Déjame en un ansia de oscuros planetas,
¡pero no me enseñes tu cintura fresca!
Me gusta cuando callas, de Pablo Neruda
Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.
Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
déjame que me calle con el silencio tuyo.
Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.
A una mujer ,de Víctor Hugo
¡Niña!, si yo fuera el rey daría mi reyno, mi tronó, mi centro y mi pueblo arrodillado, mi corona de oro, mis piscinas de pórfido, y mis flotas, para los que no bastaría el mar, por una mirada tuya.
si yo fuera Dios, la tierra y las olas, los ángeles, los demonios sujetos a mi ley, y el profundo caos de profunda extraña como a la eternidad, el espacio, los cielos como a los mundos.
¡daría por un beso tuyo!
Te quiero, de Honoré de Balzae
te quiero sin explicaciones, llamando amor a mis sentimientos y besando tu boca para emocionarme, te quiero sin motivos y con motivos, te quiero por cierto.
es bonito decir te quiero, pero más bonito es decir te quiero, lo siento y te lo demostraré punto No tengo alas para ir al cielo pero tengo palabras para decir ... Te quiero
El amor no es solo un sentimiento.
Es también un arte.