¿Dónde originaron los juegos olímpicos?
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Respuesta:
estos juegosLos Juegos Olímpicos de Verano, oficialmente conocidos como los Juegos de la Olimpiada (en inglés, The Games of the Olympiad; en francés, Les Jeux de L’Olympiade[Nota 1]), son un evento multideportivo internacional organizado cada cuatro años bajo la supervisión del Comité Olímpico Internacional. Desde 1896, reúne gran cantidad de deportistas en múltiples especialidades. Constituye el más importante de los eventos deportivos multidisciplinarios en el mundo, incluyendo la mayor cantidad de deportes o disciplinas y en el cual participan atletas procedentes de todos los países y naciones. Cinco países han participado en todas las ediciones de los Juegos: Australia, Francia, Reino Unido, Grecia y Suiza.[Nota 2] Asimismo, Reino Unido es el único país que ha ganado medallas doradas en cada una de las ediciones
Los JJOO no surgieron como una inquietud deportiva, estética o filosófica. Más bien, respondieron a una época de crisis política y económica en un mundo griego en construcción. En el siglo VIII a. C., Grecia comenzaba a salir de la llamada Edad Oscura o época Homérica (época de transición entre los siglos XII a. C y VIII a. C., nombre que recibe por la escasa documentación).
En este período se desarrollaron las polis, varios centenares de ciudades-estado más o menos independientes. Sin duda la geografía de Grecia, donde cada isla, valle y llanura se aísla de las demás por el mar, colinas, montañas, ríos o sierras, contribuía a la naturaleza fragmentada de la Antigua Grecia.
Si bien los griegos antiguos no dudaban que eran un “pueblo singular” ya que compartían la misma religión, la misma cultura básica y la misma lengua, además de sus orígenes tribales comunes, la independencia de las polis se defendía con fiereza. Aún cuando un grupo de ciudades-estado se aliaron para defender Grecia durante la segunda invasión persa, la inmensa mayoría de las polis se quedaban neutrales y, al derrotar a los persas, los aliados volvieron a sus luchas internas.
La crisis del s VIII a. C. generó fuertes enfrentamientos sociales como resultado de la injusta distribución de tierras cultivables y los privilegios arrogados para sí de las aristocracias de sangre (privilegios que no solo fueron político-militar sino también religioso, judicial y económico).