Desde mi refugio
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Otra vez hay mar gruesa, y el viento sopla en ráfagas excitantes: en pleno invierno se sienten ya los anticipos de la primavera. Un cielo nacarado, caliente y límpido hasta mediodía, grillos en los rincones umbrosos, y ahora el viento penetrando en los grandes plátanos, escudriñándolos...
Me he refugiado en esta isla con algunos libros y la niña, la hija de Melissa. No sé por qué empleo la palabra «refugiado». Los isleños dicen bromeando que solamente un enfermo puede elegir este lugar perdido para restablecerse. Bueno, digamos, si se prefiere, que he venido aquí para curarme...
De noche, cuando el viento brama y la niña duerme apaciblemente en su camita de madera junto a la chimenea resonante, enciendo una lámpara y doy vueltas en la habitación pensando en mis amigos, en Justine y Nessim, en Melissa y Balthazar. Retrocedo paso a paso en el camino del recuerdo para llegar a la ciudad que se sirvió de nosotros como si fuéramos su flora, que nos envolvió en conflictos que eran suyos y creíamos equivocadamente nuestros, la amada Alejandría.
¡He tenido que venir tan lejos para comprenderlo todo! En este desolado promontorio que Arcturo arranca noche a noche de las tinieblas, lejos del polvo calcinado de aquellas tardes de verano, veo al fin que ninguno de nosotros puede ser juzgado por lo que ocurrió entonces. La ciudad es la que debe ser juzgada, aunque seamos sus hijos quienes paguemos el precio. [...]
Esta noche estuve revisando mis papeles. Algunos han ido a parar a la cocina, la niña ha roto otros. Me gusta esta especie de censura porque tiene la indiferencia del mundo natural por las construcciones del arte. Después de todo, ¿de qué le sirve a Melissa una hermosa metáfora ahora que yace como una momia anónima en la tibia arena del estuario negro? Pero guardo con cuidado los tres volúmenes del diario de Justine, y las páginas que registran la locura de Nessim. Nessim me entregó todo a mi partida, diciendo:
—Tome esto y léalo. Aquí se habla mucho de nosotros. Le ayudará a conservar la imagen de Justine sin echarse atrás, como he tenido que hacerlo yo.
Esto ocurría en el Palacio de Verano, después de la muerte de Melissa, cuando Nessim creía aún que Justine volvería a su lado. Muchas veces pienso, y nunca sin cierto terror, en el amor de Nessim por Justine. ¿Puede concebirse algo más amplio, más sólidamente fundado en sí mismo? Daba a su desdicha un aura de éxtasis, era como esas heridas deliciosas que esperamos encontrar en los santos antes que en los simples enamorados. Sin embargo, un poco de sentido del humor le hubiera evitado un sufrimiento tan espantosamente vano. Pero es fácil criticar, lo sé. Lo sé.
En la gran calma de estas tardes de invierno hay un reloj: el mar. Su palpitación confusa que se prolonga en la mente es la fuga sobre la cual se compone este relato. Varias cadencias de las olas que lamen sus propias heridas, hoscas en las bocas del delta, bullentes en las playas desiertas, vacías, eternamente vacías bajo el vuelo de las gaviotas. [...]
Aparte de la vieja campesina arrugada que todos los días viene en su mula desde la aldea para limpiar la casa, la niña y yo estamos absolutamente solos. La niña lleva una vida feliz y activa en un ambiente extraño. Todavía no le he dado nombre. Naturalmente, se llamará Justine; ¿de qué otra manera podía ser?
Lawrence Durrell
Justine. (El cuarteto de Alejandría I), Edhasa
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
te tengo dos resumenes aqui te los dejo el resumen 2 es mas largo
resumen 1: El cielo perlado, hasta el mediodía es cálido y despejado, en un rincón fresco, ahora el viento ha penetrado los grandes plátanos, mirándolos con atención. Tengo algunos libros y un refugio para mi hija llamada Melissa en la isla. Por la noche, cuando el viento gritó y la niña se durmió plácidamente en la cama de madera junto a la chimenea resonante, encendí la luz y caminé por la habitación, pensando en mis amigos Justin y Nesim, Melissa y Balsa. Paso a paso, caminé por el camino de la memoria y llegué a una ciudad como si fuéramos nuestra flora, estábamos atrapados en nuestro propio conflicto y creímos erróneamente en nuestra amada Alejandría.
Sobre esta capa desolada, Arcturus venía de la noche, de la noche, lejos de la tierra quemada de esas tardes de verano, finalmente vi que no podíamos juzgar lo que sucedió en ese momento. Incluso si somos niños los que pagamos el precio, esta ciudad es una ciudad que hay que juzgar. Esta noche estoy revisando mi trabajo. Algunas personas ya están en la cocina, y la niña ha roto a otras.
Pero guardo cuidadosamente los tres volúmenes del diario de Justine y la página que registra la locura de Nessim. Como deseo, le ayudará a conservar la imagen de Justine sin pestañear. Esto sucedió en el Palacio de Verano después de la muerte de Melissa, cuando Nessim todavía creía que Justin volvería con él. A menudo pienso en el amor de Nessim por Justine, y nunca he tenido una cierta cantidad de miedo.
La niña lleva una vida feliz y activa en un ambiente extraño. Naturalmente, su nombre es Justin, ¿cómo es posible?.
resumen 2: El mar vuelve a estar pesado y hay ráfagas de viento: en pleno invierno, la gente ya ha sentido la anticipación de la primavera. El cielo perlado, hasta el mediodía es cálido y despejado, en un rincón fresco, ahora el viento ha penetrado los grandes plátanos, mirándolos con atención. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Tengo algunos libros y un refugio para mi hija llamada Melissa en la isla. No sé por qué se usa el término "refugiado". Los isleños bromearon diciendo que solo un paciente puede elegir este lugar perdido para recuperarse. Bueno, si quieres, puedes decir que estoy aquí para curar ...
Por la noche, cuando el viento gritó y la niña se durmió plácidamente en la cama de madera junto a la chimenea resonante, encendí la luz y caminé por la habitación, pensando en mis amigos Justin y Nesim, Melissa y Balsa. Paso a paso, caminé por el camino de la memoria y llegué a una ciudad como si fuéramos nuestra flora, estábamos atrapados en nuestro propio conflicto y creímos erróneamente en nuestra amada Alejandría.
¡Tengo que ir hasta ahora para entender todo esto! Sobre esta capa desolada, Arcturus venía de la noche, de la noche, lejos de la tierra quemada de esas tardes de verano, finalmente vi que no podíamos juzgar lo que sucedió en ese momento. Incluso si somos niños los que pagamos el precio, esta ciudad es una ciudad que hay que juzgar. [...]
Esta noche estoy revisando mi trabajo. Algunas personas ya están en la cocina, y la niña ha roto a otras. Me gusta este sistema de censura porque, naturalmente, es indiferente a la estructura del arte. Después de todo, Melissa yace como una momia anónima en las cálidas arenas de la desembocadura del río Heihe ¿De qué sirve esta hermosa metáfora? Pero guardo cuidadosamente los tres volúmenes del diario de Justine y la página que registra la locura de Nessim. Nessim me dio todo cuando se fue, diciendo:
"Aceptar y leer." Hay mucho sobre nosotros aquí. Como deseo, le ayudará a conservar la imagen de Justine sin pestañear.
Esto sucedió en el Palacio de Verano después de la muerte de Melissa, cuando Nessim todavía creía que Justin volvería con él. A menudo pienso en el amor de Nessim por Justine, y nunca he tenido una cierta cantidad de miedo. ¿Se puede concebir una base más amplia y sólida? Trajo un aura de éxtasis a su dolor, al igual que las deliciosas heridas que esperamos encontrar entre los santos, no simples amantes. Sin embargo, un poco de sentido del humor lo salvará de este terrible e inútil dolor. Pero sé que es fácil de criticar. Sé.
En la calma de estas tardes de invierno, hay una vigilia: el mar. El movimiento caótico en la mente de su historia es el misterio que compone esta historia. Varias olas autosuficientes golpean el estuario del delta, burbujeando en la playa desierta, vacías y siempre vacías en el vuelo de las gaviotas. [...]
A excepción de los viejos campesinos arrugados que vienen del pueblo todos los días para limpiar la casa, la niña y yo definitivamente estamos solos. La niña lleva una vida feliz y activa en un ambiente extraño. Todavía no le he dado un nombre. Naturalmente, su nombre es Justin, ¿cómo es posible?
Explicación:
ojala te sirva