descripcion de los personajes del libro los pargos azules
Respuestas a la pregunta
a obra fue editada por HindePomeraniec y Lorenza Estandia, mientras el diseño de su cubierta corresponde a Libardo Mahecha y la diagramación a Blanca Villalba. La imagen de portada recrea la escena recurrente de reunión, de los dos personajes protagónicos: Lucía y Azul (O Daniel) en el muelle o canal, como le llaman, donde se hacen confesiones entre ellos y también, en soledad, al mar.
Además de estos dos niños que van dejando atrás la infancia para enfrentar la adolescencia, se encuentran otros personajes muy cercanos y bien diseñados en sus peculiaridades y contrastes. Tales son los componentes de ambas familias, integradas la del niño por su madre, ama de casa, y su buen padrastro Silvio, que maneja un ómnibus de turismo para mantener el hogar; el padre de Daniel, homosexual, de nombre Ángel, que es peluquero y vive aparte; el abuelo materno intolerante: Tata, tejedor de redes, y su pequeña hermana. De la niña participan su madre, que limpia los pisos del hospital del pueblo, y sus hermanos de distinto padre: uno preso y los restantes desconocidos. El hermano mayor, Miguel, se irá dibujando progresivamente en el desarrollo de la trama principal como un personaje agresivo y abusador, a diferencia del otro hermano menor, siempre enfermo de asma. El contraste entre ambas está marcado básicamente por la presencia o ausencia del amor y la consideración entre ellos.
Del escenario escolar participan adultos y menores como los pésimos estudiantes y antagonistas nombrados el Berna y Yadier, quienes viven amenazando, chantajeando y burlándose de Daniel y de Lucía; y Viviana, la niña de familia pudiente y con fama de superficial belleza en la escuela. Como personaje de referencia se presenta la maestra, oportunista e interesada por los regalos, alejada de los problemas reales del grupo, quien critica, humilla y compara a la niña que va con los zapatos rotos y el uniforme sucio con aquella otra cuyas posibilidades llegan a detestables sobornos.
Del barrio se menciona a Raquel Pimienta, la “casa sola” del pueblo; los hombres que frecuentan el bar, y las señoras que asisten a arreglarse el cabello a la peluquería de Ángel, así como a los pescadores y demás hombres de mar que trabajan en el entorno escogido por la autora para desarrollar su trama, una localidad cercana a Remedios, en su natal provincia de Villa Clara, a través de cuya descripción transmite el amor que siente por su suelo.
Las peripecias narradas van desde las contradicciones entre los infantes hasta los problemas laborales y sociales de los mayores, tocando profundamente temas álgidos y contemporáneos como el machismo y los vicios, la pobreza y la necesidad material y espiritual, pasando por un huracán típico cubano, pero siempre desde la mirada infantil, omitiendo en el lenguaje todo lo soez y obsceno que puede herir, y sin embargo, dando luz sabiamente, con delicadeza y dolor, a aquellos sucesos vergonzosos o simplemente secretos que viven los más chicos en su transformación hacia la adultez. El clímax, potenciado escalonadamente con cada punto de giro dramatúrgico, sorprenderá indiscutiblemente a quien ose sumergirse en las páginas de tan intensa creación. Simbolismo, metáfora, sensibilidad y crudeza en dosis casi ideales, son cualidades que pertenecen indiscutiblemente al texto, comenzando por el título, seleccionado con gran acierto.