Describe el espectáculo en la antigua roma
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Los grandes espectáculos eran los principales entretenimientos populares en la Antigua Roma. Al contrario que en Grecia, juegos deportivos como el atletismo o el boxeo no eran demasiado populares. Como dictan las Res Gestae divi Augusti, podemos encontrar seis tipos de grandes Spectacula en la etapa imperial: Ludi Circensis, Ludi Scaenici, Certamina Athelarum, Munera Gladiatorum y Naumachiae.
ESPERO A VERTE AYUDADO MUCHO.....
Respuesta:
Los grandes espectáculos eran los principales entretenimientos populares en la Antigua Roma. Al contrario que en Grecia, juegos deportivos como el atletismo o el boxeo no eran demasiado populares. Como dictan las Res Gestae divi Augusti, podemos encontrar seis tipos de grandes Spectacula en la etapa imperial: Ludi Circensis, Ludi Scaenici, Certamina Athelarum, Munera Gladiatorum y Naumachiae.
Básicamente eran los juegos celebrados en los circos romanos. Este era un recinto con forma ovalada con una separación central o spina. Dicha espina dividía en dos carriles la arena, conformando así la pista de carreras. Asimismo, estos edificios eran los de mayor tamaño, pudiendo albergar el Circo Máximo de Roma entre 200.000 y 300.000 espectadores. Por ejemplo, el circo de Emérita Augusta tenía una capacidad de 30.000 asistentes, prácticamente toda la población de la ciudad en su apogeo.
Explicación:
Aquí, se practicaban las carreras de carros de diferentes modalidades según el tiro. En primer lugar tenemos las bigas (dos caballos), trigas (tres caballos) o cuadrigas (cuatro caballos).
En uno de los extremos del recinto, se situaban las puertas o carceres, donde se colocaban los carros antes de salir a pista. Cuando estaban preparados, el anfitrión arrojaba un pañuelo o mappa que daba inicio a la carrera. Esta tenía una duración de entre 7 y 5 vueltas (en las griegas eran 12) y el que primero las completara se coronaría vencedor.
Estos espectáculos eran sumamente peligrosos, tanto para el auriga como para el caballo. Lo accidentes aquí eran habituales, sufriendo los participantes graves lesiones e incluso la muerte en muchas ocasiones.
Las carreras alcanzaron un alto grado de popularidad en Hispania, siendo sus aurigas y caballos famosos en todos los rincones del Imperio. Uno de los más destacados es el hispano Cayo Apuleyo Diocles (siglo II d. C.). Al final de su carrera, este había ganado 1.462 juegos y había acumulado una fortuna de 35.863.120 sestercios.