derechos y deberes del niño en relación a su persona a su familia
Respuestas a la pregunta
La Convención Internacional de los Derechos del Niño da a todo niño el derecho a una familia. El derecho a la familia permite relacionar al niño a una historia y sobre todo le ofrece un perímetro de protección contra la violación de sus derechos. Los niños alejados de su familia se convierten en víctimas fáciles de la violencia, la explotación, la trata, ladiscriminación u otro tipo de maltrato. Sin embargo, puede pasar que la familia que debería en principio proteger al niño le infrinja malos tratos.
Definición de FamiliaUna familia es una comunidad de personas reunidas por lazos de parentesco que existen en todas las sociedades humanas. Está compuesta de un nombre, un domicilio y crea entre sus miembros una obligación de solidaridad moral y material (particularmente entre padres e hijos).
En las sociedades tradicionales las familias amplias, (designadas hoy con el nombre de clan), están compuestas de decenas e incluso centenares de hogares con funciones diversas.
En las sociedades modernas, la familia se ha reducido progresivamente a un solo grado de parentesco o de alianza: la familia nuclear (padre, madre e hijo-s).
Los padres son los primeros que pueden actuar en nombre del niño y hacer respetar sus derechos. El padre y la madre usan sus derechos y cumplen sus deberes decidiendo en el lugar de su hijo. Tienen por objetivo proteger al niño asegurando su educación, su desarrollo, su seguridad, su salud y su moralidad.
La fijación de la residencia del niñoEl niño tiene la obligación de vivir con sus padres, debido a que estos tienen un derecho y un deber de “cuidado”. Ellos fijan la residencia de su hijo. La ley prevé, por otro lado, que “el niño no puede, sin permiso de sus padres, dejar la casa familiar y sólo puede ser retirado en caso de necesidad cuando lo determine la ley”. Esta regla se impone al niño, pero también a los terceros. El niño no puede residir en casa de alguien sin permiso de sus padres.
La vigilancia del niñoProteger la salud, la seguridad y la moralidad de un menor implica un deber de vigilancia. Los padres velan por sus hijos, controlando sus idas y venidas, el conjunto de sus relaciones (miembros de la familia, amigos y conocidos), su correspondencia (ver art. 16 CDN) y, más generalmente, el conjunto de sus comunicaciones (correos y teléfono). Así, pueden prohibir a su hijo mantener relaciones con ciertas personas si consideran que no son conformes a su interés.
La escolarización y la educación del niñoLos padres tienen el papel esencial de educar a sus hijos. Esta misión no se limita a la inscripción en un establecimiento escolar. También, comprende la educación moral, cívica, religiosa, sexual, etc. El objetivo es aportarle todos los conocimientos y aprendizaje necesarios para que pueda vivir en sociedad y adquirir una autonomía suficiente para el día en que se convierta en adulto.
La toma de decisión en materia de salud del niñoLos padres deciden loscuidados que van a dar a su hijo, los tratamientos que debe seguir, autorizan su admisión en el hospital o consienten una operación. Salvo urgencia, ninguna práctica médica puede ser realizada en el menor sin el consentimiento de los padres.
El sustento del niñoLos padres deben alimentar a sus hijos y darles sustento en proporción a sus recursos y a su necesidades. Esto se aplica a los casos donde el padre y la madre viven juntos o separados. Se trata, evidentemente, de alimentarlos. Los padres deben asumir también los gastos de sus estudios e instrucción en general, las vacaciones y una cobertura de salud.
Malos tratos infringidos al niñoLos malos tratos infringidos a un niño por uno de sus padres o los dos pueden tomar muchas formas y constituyen la causa más común de muerte en los niños menores de dos años de edad.
Violencia físicaLos índices de violencia física contra los niños establecidos a partir de encuestas de población varían considerablemente. En una encuesta realizada en 1995 en Estados Unidos, se les preguntó a los padres cómo reprendían a sus hijos. El resultado fue una tasa de violencia física de aproximadamente 49 por cada 1.000 niños, tomando en cuenta los comportamientos siguientes: golpear al niño con un objeto, darle una patada, pegarle o amenazarle con un cuchillo o un arma de fuego. Según algunos estudios, los índices no son inferiores en otros países y puede que sean, de hecho, superiores a los índices de violencia física en los Estados Unidos.