Definicion de la ley del acento
Respuestas a la pregunta
Todo verso simple tiene siempre un acento en la penúltima sílaba y en los versos compuestos aparece un acento en la penúltima sílaba de cada hemistiquio. Este acento fijo en la penúltima sílaba se llama acento estrófico. Todos los acentos de cada verso que coinciden con el signo par o impar del acento estrófico son acentos rítmicos; los acentos que no coinciden con el signo par o impar del acento estrófico son acentos extrarrítmicos.
Por fin, puede darse el caso de que junto a una sílaba que lleva acento rítmico aparece otra sílaba acentuada, el acento de esta sílaba se llama acento antirrítmico. Este acento es muy importante ya que el poeta puede servirse de él para remarcar una palabra sobre la que quiere llamar la atención.
El otro procedimiento que debemos considerar cuando contamos las sílabas de un verso, es la ley del acento final. Esta ley señala que -según la acentuación de la última palabra del verso- el número de sílabas se modifica, de la siguiente manera:
Si la última palabra del verso es aguda, se suma una sílaba al verso.
Si la última palabra del verso es grave, el verso no se modifica.
Si la última palabra del verso es esdrújula, se resta una sílaba al verso.
Por ejemplo, contemos ahora un segundo verso: “Su amor de las entrañas me arranqué”.
La medida del verso ( número de sílabas) se cuenta desde su primera sílaba. Se toma como base el verso que termina en palabra grave
Si el verso termina en palabra aguda o monosílaba, se le agrega una sílaba:
Si el verso termina en una palabra grave queda igual.
Si el verso termina en palabra esdrújula, se resta una sílaba.