de que manera influyo la invasion de napoleon a españa para la independencia de México
Respuestas a la pregunta
DETONANTE
La Capitanía General de Guatemala estaba conformada por Guatemala, San Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Chiapas, esta última que se sumó a la liberación del Virreinato de México, inicialmente propulsada el 16 de septiembre de 1810 por el cura Miguel Hidalgo, quien lanzó el “Grito de Dolores”, alentando al pueblo a luchar contra los españoles que apoyaban a Napoleón Bonaparte, quien había invadido a España.
Historiadores registran factores internos y externos que contribuyeron a la emancipación de Centroamérica, como la Independencia de Estados Unidos (1776) del reino de Inglaterra y el triunfo revolucionario en Francia (1789).
Pero coinciden en señalar que el detonante fue la Invasión de Napoleón Bonaparte a España, en 1808, ya que provocó la retirada del rey Fernando VII, “El Deseado”, con el consiguiente debilitamiento de la monarquía y la convocatoria a las Cortes de Cádiz en 1812.
El emperador impuso como soberano de España a su hermano, José Bonaparte, llamado por los españoles como “el rey intruso”. En las Cortes de Cádiz “se promulgaron normas democráticas de gobierno que fueron abolidas al volver Fernando VII al poder, pero que dejaron una semilla para el florecimiento de las ideas libertarias”.
Es decir que la Independencia de México y Centroamérica fueron un gran suceso al que indirectamente contribuyó el emperador Bonaparte, aunque no supo del acontecimiento porque murió meses antes, el 5 de mayo de 1821, a los 51 años de edad, en la isla africana de Santa Elena, desterrado por los ingleses que le vencieron en la batalla de Waterloo (Bélgica), el 18 de junio de 1815.
MEXICO
Las fuentes bibliográficas consultadas en la excapital Comayagua, sobre todo con el auxilio del Ayuntamiento (Alcaldía Municipal), la Casa de la Cultura y el Museo de los Gobernantes Federal y Republicano José Trinidad Cabañas” (la “Casa Cabañas”), corroboran que a la invasión de España por Bonaparte, prosiguió una escalada de hechos que culminaron en la independencia del Reino de México y luego el de Guatemala.
Fue así como el cura Hidalgo ganó algunas batallas y organizó un gobierno en Guadalajara, pero sería derrotado y fusilado el 30 de julio de 1811, mientras que el también sacerdote José María Morelos surgió como líder y conquistó casi todo el sur y centro de México, habiendo organizado el Congreso de Anáhuac, que en 1814 aprobó la Constitución de Apatzingán, de un carácter liberal republicano.
Con todo, se cuenta que los criollos le negaron ayuda, al tiempo de apoyar la renovación absolutista del rey Fernando VII y la represión del virrey Félix María Calleja y tras varias derrotas, Morelos sufrió igual destino que Hidalgo, el 22 de diciembre de 1815.
Quedaba el también líder independentista Vicente Guerrero, luchando en el sur hasta sufrir una grave derrota en Agua Zarca, en 1819, pero se mantuvo rebelde y fue perseguido por el general Agustín de Iturbide, quien al no poder derrotarlo le ofreció un pacto para unir sus fuerzas y proclamar la Independencia de Nueva España (México). Así, el 24 de febrero de 1821 firmaron el “Plan de Iguala”, mediante el cual se declaró la Independencia de México.
En consecuencia, las intendencias de sur de México, incluso la de Chiapas, que formaba parte de la Capitanía General de Guatemala, instaron a que los pueblos de la región también se independizaran del dominio español. Para agosto se suscribieron los Tratados de Córdoba, donde se proclamó el nacimiento del Imperio Mexicano y, en mayo de 1822, Iturbide fue proclamado Emperador de México independiente.