de donde proviene el machismo
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Aunque hay evidencia científica de sobra, aún hay quienes creen que hay diferencias entre los cerebros de los hombres y las mujeres. En realidad, el machismo se construye todos los días y es el resultado de una cultura que ve a lo masculino como superior.
Explicación:
corona♡☆
Respuesta:
Es un conjunto de creencias, costumbres y actitudes que sostienen o expresan tácitamente que el hombre es superior a la mujer. El machismo afirma que el hombre es la figura más importante, dueño del poder y representante del ser humano. Es decir, el machismo asigna a las mujeres características de inferioridad. Por lo tanto, quienes creen en el machismo o han sido educados en él, consideran que es el hombre quien tiene poder de decisión y elección, quien puede mandar y ordenar, conquistar y proponer en las relaciones afectivas y sexuales, quien debe recibir mayor retribución económica, entre otras creencias. Además, consideran que hay oficios para hombres y otros para mujeres, así como actividades exclusivas para hombres. Por eso es usual escuchar que el hombre no debe asumir tareas del hogar (barrer, cocinar, planchar…) y que las mujeres no deben realizar tareas que impliquen el uso de la fuerza.
Las creencias machistas han pasado de generación en generación y por eso aún hoy muchas personas en distintas sociedades y culturas las conservan e incluso las ven como algo normal. En otros casos, el machismo ha permeado tanto la educación escolar, familiar y los medios de comunicación, que no se ve como una creencia sino como algo natural, es decir, se asume que biológicamente las mujeres son frágiles, dependientes e incapaces para desarrollar determinados trabajos u oficios. Sin embargo, muchas otras sociedades han relegado el machismo e intentan tener relaciones equitativas entre hombres y mujeres.
Al ser una idea, el machismo puede combatirse y contrarrestarse; así se garantiza que hombres y mujeres gocen de los mismos derechos y oportunidades. El machismo se expresa fundamentalmente en los llamados “estereotipos de género”.
Explicación: