Cuentos sobre el iva
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Retomamos la publicación de nuestro newsletter semanal, tras el parón vacacional, con mucha fuerza y queriendo abordar muchos temas que ya están de actualidad, pero que en el próximo cuatrimestre van ser cruciales para el sector agroalimentario.
Y empezamos recordando el terremoto ocurrido la semana pasada en Italia. Nuestro apoyo más sincero a los familiares de las víctimas.
Hoy vamos a hablar del IVA. España y Portugal han logrado esquivar las multas por el incumplimiento del déficit y han evitado estrenar el sistema de sanciones previsto en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la UE.
Sin embargo, nadie da duros a cuatro pesetas y este regalo de Bruselas puede no salir gratis. Parte de los fondos estructurales quedarían bloqueados y comprometidos al cumplimiento de futuros ajustes. España deberá ahorrar 10.000 millones de euros en los próximos dos años y desde la UE ya han comenzado las recomendaciones sobre cómo hacerlo.
De momento, se ha sugerido que se modifique el IVA, ya que se considera que la recaudación es menor de lo que debería: un 11,6% del PIB, mientras que la media europea se encuentra en un 15,2%. La forma de aumentar la recaudación propuesta por Bruselas pasa por disminuir las categorías que actualmente se benefician del IVA reducido, entre las que se encuentran sectores clave para la economía española como la alimentación y la hostelería.
Explicación:
Está viendo:OpiniónEl IVA y el cuento del lobo
Retomamos la publicación de nuestro newsletter semanal, tras el parón vacacional, con mucha fuerza y queriendo abordar muchos temas que ya están de actualidad, pero que en el próximo cuatrimestre van ser cruciales para el sector agroalimentario.
Y empezamos recordando el terremoto ocurrido la semana pasada en Italia. Nuestro apoyo más sincero a los familiares de las víctimas.
Hoy vamos a hablar del IVA. España y Portugal han logrado esquivar las multas por el incumplimiento del déficit y han evitado estrenar el sistema de sanciones previsto en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la UE.
Sin embargo, nadie da duros a cuatro pesetas y este regalo de Bruselas puede no salir gratis. Parte de los fondos estructurales quedarían bloqueados y comprometidos al cumplimiento de futuros ajustes. España deberá ahorrar 10.000 millones de euros en los próximos dos años y desde la UE ya han comenzado las recomendaciones sobre cómo hacerlo.
De momento, se ha sugerido que se modifique el IVA, ya que se considera que la recaudación es menor de lo que debería: un 11,6% del PIB, mientras que la media europea se encuentra en un 15,2%. La forma de aumentar la recaudación propuesta por Bruselas pasa por disminuir las categorías que actualmente se benefician del IVA reducido, entre las que se encuentran sectores clave para la economía española como la alimentación y la hostelería.
La alimentación, en función del tipo de producto, se encuentra incluida en el tipo reducido (10%) o en el tipo súper reducido (4%) en el caso de los productos más básicos. La restauración, por su parte, se encuentra en el tipo reducido (10%). Por lo tanto, incluir estos sectores en el grupo del tipo general del IVA (21%) supondría, en el mejor de los casos, duplicar sus impuestos y, en el peor, multiplicarlo por cinco, como sería el caso de los alimentos más básicos.
Las consecuencias negativas de estas subidas en el IVA serían obvias para los consumidores, más aún tratándose de un impuesto regresivo, pero debemos prestar también atención a las consecuencias que tendrían sobre la restauración, un sector que está muy relacionado con el turismo y que, por tanto, tiene especial relevancia en España.
Según hemos conocido en estos días, España es el país del mundo con más bares en relación a sus habitantes, concretamente, un bar por cada 175 españoles, y además el número de establecimientos está volviendo a aumentar tras varios años de descenso. En cuanto al turismo, no nos quedamos atrás, y somos el tercer país del mundo en número de turistas (por detrás de Francia y Estados Unidos). Con un nuevo récord cada año, los hosteleros españoles esperan recibir a lo largo de este año 70 millones de turistas.
Estos datos se reflejan en el empleo hasta el punto de que la hostelería es uno de los motores en la creación de nuevos empleos en España. En este escenario, nos preguntamos si es recomendable gravar tan severamente uno de los motores de la economía española y arriesgarse a una reducción en el consumo, que lastre el empleo y el ansiado aumento en la recaudación de impuestos; tanto de cara a los extranjeros que nos visitan, como a los consumidores nacionales, que deberán pagar más en comercios, bares y restaurantes.