Cuentos no tan largos
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Respuesta:
La cabaña encantada
Los fines de semana mi familia y yo acostumbramos pasear en lugares alejados de la humanidad. Tuvimos que viajar horas tras horas, sentía mi cuerpo adormecido y exhausto; mis hermanas se veían muy felices, al parecer no sentían sus cuerpos adormecidos como el mío. Dejé un lado la negatividad de lo cansada que me sentía y empecé a platicar con mi familia y admirar los paisajes que recorríamos.
Teníamos una mascota especial, con esto no quiero decir que tenga una discapacidad, sino que era un animal único; su cuerpo parecía gelatinoso, tenía grandes orejas de conejo y sus patas eran de jabalí, su nombre era Pascual. En la ruta que llevábamos nos encontramos con varios caminos y tomamos la decisión de conducir por el lado izquierdo al elegir ese camino tuvimos que cruzar un túnel, sentía escalofríos y temor al salir de allí solo habitaba la niebla. Mi padre intentó buscar en el mapa este lugar, pero no lo halló, nos preocupamos por que estábamos perdidos y pasaron unos minutos, ya casi eran las 3 de la mañana y escuchamos las voces de unos hombres y pascual estaba ladrando y mi padre abrió la puerta del carro y pascual salió corriendo y nos fuimos tras él. y allí nos encontramos con una cabaña, decidimos entrar al abrir la puerta se veía otro lugar. Era un paraíso, había muchas especies de animales como Pascual, personas gigantes, hadas, duendes. Que damos ¡sorprendidos! Nos mirábamos unos a otros sin
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si te sirve