cuento de perro que no podía ladrar
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
EL PERRO QUE NO SABÍA LADRAR
Gianni Rodari
Había una vez un perro que no sabía ladrar. No maullaba, no mugía, no relinchaba, no sabía decir
nada. Era un perrillo solitario, a saber cómo había caído en una región sin perros. Por él no se habría
dado cuenta de que le faltara algo. Los otros eran los que se lo hacían notar. Le decían:
- ¿Pero tú no ladras?
- No sé... soy forastero.
- Vaya una contestación. ¿No sabes que los perros ladran?
- ¿Para qué?
- Ladran porque son perros. Ladran a los vagabundos de paso, a los gatos despectivos, a la luna llena.
Ladran cuando están contentos, cuando están nerviosos, cuando están enfadados. Generalmente
de día, pero también de noche.
- No digo que no, pero yo...
- Pero tú, ¿qué? Tú eres un fenómeno, oye lo que te digo: un día de éstos saldrás en el periódico.
El perro no sabía cómo contestar a estas críticas. No sabía ladrar y no sabía qué hacer para aprender.
Explicación: