¿cuántos tipos de empresas hay y cuáles son sus características?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Empresas públicas
Son aquellas cuyos recursos son provistos por el Estado. En algunos países, los servicios públicos son gestionados por empresas de este tipo.
Empresas privadas
En este caso, el capital es de origen privado y es provisto por individuos particulares o personas jurídicas.
Empresas mixtas
Las empresas mixtas suelen ser administradas por organizaciones privadas, pero dependen de fondos o supervisión de entes públicos. Algunas empresas dedicadas a la explotación petrolera o minera funcionan bajo este esquema.
Tipos de empresas según el alcance de su actividad
Dependiendo del alcance territorial de su actividad, las empresas pueden ser:
Empresas locales
Tienen un alcance limitado, y generalmente son micro, pequeñas o medianas empresas. Un kiosko, verdulería o carnicería son algunos ejemplos.
Empresas regionales
Como indica su nombre, actúan en una región concreta, como un estado o provincia. Un banco que, por su tamaño, solo opere en una parte concreta del país, sería una empresa regional.
Empresas nacionales
Sus operaciones se extienden a todo el país, lo que suele implicar una estructura económica y comercial muy especializada. Las grandes empresas responden a este modelo, aunque una micro, pequeña o mediana empresa que tenga capacidad de suplir una demanda nacional (como un e-commerce, por ejemplo), también podría entrar en esta categoría.
Empresas transnacionales
Operan dentro y fuera del país. Son las empresas de mayor alcance, ya que pueden ofrecer sus productos y servicios en diferentes mercados. Amazon, por ejemplo, es una de las multinacionales más conocidas.
Explicación:
Tipos de empresas según el origen de su capital
El origen de los fondos de una empresa solo puede ser público o privado. En función de esto, se clasifican en:
Respuesta:
Existen empresas de muchos tipos, que podemos organizar según diversos criterios. Algunos de dichos criterios son el tipo de actividad que realizan, el origen de los recursos económicos necesarios para que desarrollen su actividad, en qué esfera territorial actúan, su constitución jurídica o incluso su tamaño.
1. Tipos de empresa según sector económico:
Un tipo de clasificación de las empresas tiene que ver con el sector económico y el grupo de actividad que realizan.
1.1. Empresas del sector primario:
Se trata de aquellas organizaciones que basan su actividad económica en la recolección de materias primas, que permiten la subsistencia y la transformación posterior de dichas materias. Se trata de empresas esenciales sin las cuales no sería posible la existencia de los otros dos sectores. Dentro de este sector encontramos actividades tales como la agricultura, la ganadería, la pesca y la minería.
1.2. Empresas del sector secundario:
Las empresas del sector secundario se encargan de la transformación de materias primas, convirtiéndolas en distintos bienes listos para el consumo. Dentro de este sector se incluyen actividades como la construcción y la industria, tanto a nivel de manufactura como de transformación de energía.
1.3. Empresas del sector terciario:
El sector terciario se basa en todas aquellas actividades vinculadas a la creación y gestión de servicios que permiten garantizar el bienestar de la población. En las sociedades occidentales actuales suelen ser los tipos de empresa más prevalentes en la gran ciudad. Dentro de este grupo podemos encontrar empresas dedicadas a la medicina, la educación, la psicología, el comercio, el turismo y la hostelería, la asistencia social, los transportes, la seguridad, la administración o las artes, por ejemplo.
2. Según el control de los recursos:
Otra manera de clasificar las empresas es según el origen de los recursos que poseen. En este sentido encontramos los siguientes tipos de empresa.
2.1. Empresas públicas:
Este tipo de empresas son aquellas que se encuentran gestionadas por la administración del Estado.
2.2. Empresas privadas:
En las empresas privadas los recursos económicos provienen de individuos particulares.
2.3. Empresas concertadas:
Este tipo de organizaciones son gestionadas por organismos generalmente privados, si bien se encuentran supeditadas y en parte subvencionadas por la administración.
3. Según la esfera territorial en la que actúan:
Donde actúa una empresa también puede ser un criterio a la hora de clasificar a las empresas. Podemos encontrar los siguientes tipos.
3.1. Empresa local:
Se trata de uno de los tipos de empresa más comunes, que limita su terreno de actuación a una única localidad, como una ciudad o un pueblo. Por ejemplo, una carnicería.
3.2. Empresa regional:
Su ámbito de actuación se circunscribe a una región concreta, como por ejemplo una comunidad autónoma.
3.3. Empresa nacional:
La empresa en cuestión puede actuar a lo largo de toda una nación.
3.4. Empresa multinacional:
La empresa ofrece sus servicios en más de un país, teniendo un gran alcance y expandiendo sus oportunidades de negocio, si bien también supone mayor inversión.
4. Según su constitución jurídica:
Según la constitución jurídica de la empresa en cuestión podemos encontrar los siguientes tipos de empresa.
4.1. Societarias:
Se trata del tipo de empresa que supone la elaboración de una sociedad, es decir que supone la asociación de varias personas vinculadas por contrato. Suponen la creación de una persona jurídica diferente de la de los diferentes miembros que la componen. Dentro de las empresas societarias podemos distinguir varios tipos de empresa tales como las sociedades anónimas, las cooperativas o las sociedades de responsabilidad limitada.
4.2. Autónomos:
Se trata de empresas llevadas a cabo por una única persona, que asume toda la responsabilidad y emplea sus propios recursos para hacer frente a la apertura y mantenimiento de su negocio.
5. Según el tamaño de la organización:
El tamaño de la empresa, en función del número de trabajadores, capital existente y volumen de facturación, también nos permite establecer tres tipos de empresa.
La mediana empresa suele poseer entre una cincuentena y doscientos cincuenta empleados, facturando menos de cincuenta millones de euros y teniendo un activo total de menos de cuarenta y tres millones. Empresas regionales e incluso algunas nacionales suelen estar dentro de esta consideración.
Las multinacionales suelen estar en este grupo. Se trata de empresas con un volumen de facturación superior a los cincuenta millones y un activo total superior a los cuarenta y tres. Generalmente tienden a poseer más de doscientos cincuenta empleados.
Se entiende por pequeña empresa aquella en que el número de trabajadores no supera los cincuenta, factura anualmente menos de diez millones de euros y de la cual el patrimonio poseído no supera dicha cantidad. Suele tratarse de pequeños negocios o empresas circunscritas a una localidad concreta.