cuantas y cuales eran las persecuciones contra los cristianos
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Hubo diez grandes persecuciones romanas contra el cristianismo, denominadas generalmente con el nombre de los emperadores que las decretaron: las de Nerón, Domiciano, Trajano, Marco Aurelio, Septimio Severo, Maximiano, Decio, Valeriano, Aureliano y Diocleciano.
1. La persecución de Nerón
La primera persecución dirigida por el Imperio hacia el cristianismo se dio en el año 64d.C. durante los tiempos del emperador Nerón (37-68).
Roma había sido incendiada y, al parecer, la única justificación coherente que encontró el emperador fue culpar a los cristianos. No se tiene evidencia de que alguien fuera de la comunidad cristiana protestara por el hecho de haber culpado a los seguidores de Jesús de esta tragedia, lo que podría suponer que el cristianismo ya era bastante impopular entre los ciudadanos de la capital del Imperio.
- La persecución de Domiciano
A pesar de que durante este periodo hubo confrontación entre el pensamiento cristiano y el pagano, algunos estudios e investigaciones modernas han sugerido que no fue de grandes dimensiones. Se dieron algunos asesinatos y destierros.
- La persecución de Trajano
El emperador no simpatizaba con el cristianismo, así que, a pesar de no perseguirlos de manera directa, si alguien los acusaba, se podría proceder en su contra. Como consecuencia, el solo hecho de ser cristiano ya representaba una posible sanción legal.
- La persecución de Adriano
Aunque este emperador fue más indulgente con los cristianos, durante este periodo se siguió manteniendo la persecución legal a los seguidores de Jesús.
- La persecución de Marco Aurelio
A pesar de ser considerado como un emperador ilustrado, no escondió su aversión hacia el cristianismo. En el año 177 d.C instigó una persecución en la ciudad de Lyon. También impulsó a Celso a escribir un tratado en contra del cristianismo.
- La persecución de Septimio Severo
Durante este periodo, convertirse en cristiano y bautizarse se volvió un acto ilegal y castigable con la muerte
- La persecución de Maximino Tracio
El emperador promulgó un edicto u orden de ejecución contra los dirigentes cristianos.
- La persecución de Decio
Para aquel entonces el Imperio no consideraba a los cristianos meramente como oportunos chivos expiatorios, como en el tiempo de Nerón, miembros de una minoría despreciable a los que podía ejecutarse si se hacía pública su condición, como en el periodo de Trajano, o seguidores de un culto repugnante que merecían la prohibición y la muerte, como en los tiempos de Marco Aurelio.
- La persecución de Valeriano
se prohibieron las reuniones cristianas y se arrestaron a numerosos obispos. Quizá se esperaba que el ataque contra los dirigentes debilitaría al movimiento, pero la estrategia de Valeriano no dio los resultados que esperaba. Al año siguiente, convencido de que la aniquilación de la jerarquía no se traduciría en el final del cristianismo, ordenó la ejecución de todos los diáconos y laicos de relevancia que no apostataran.
- La persecución de Diocleciano
Diocleciano ordenó, por influencia de Galerio, la destrucción de las iglesias y la quema de todos los volúmenes donde aparecieran recopiladas porciones de las Sagradas Escrituras en lo que sería la décima y última gran persecución.