¿Cuando un estudiante está bien adaptado?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
La educación especial se ha convertido en los últimos años en uno de los temas de enfrentamiento, en el ya de por sí tenso, sistema educativo español. ¿Cuál es su opinión?
La atención educativa a la diversidad jamás debería ser un instrumento para llevarnos al enfrentamiento. Todo lo contrario, debe ser un aspecto que nos una a toda la sociedad, todo alumno tiene derecho a recibir una atención educativa de calidad y, por tanto, debemos unirnos para que esto se cumpla y así se lleve a la práctica. En los últimos años ha tomado mayor relevancia el ataque hacia la educación especializada argumentando desde algunos sectores que, mientras no exista una única modalidad educativa, jamás tendremos una educación inclusiva y, por tanto, un país inclusivo, de lo cual discrepo.
La existencia de diversas modalidades educativas hace que nuestro sistema educativo sea más libre, plural y eficiente. Sí tengo que destacar que la educación especializada en España ha sabido dar una respuesta óptima a los alumnos con diversas necesidades propiciando su inclusión educativa, social y laboral, mientras que la educación ordinaria, por diversas razones, se ha quedado algo estancada en este aspecto. Es más fácil atacar lo que funciona bien, en lugar de comenzar a mejorar lo que tal vez no funciona de manera óptima.
2. Por lo tanto, ¿cree que es posible que cualquier centro pueda estar en condiciones de facilitar el mejor aprendizaje a cualquier alumno, sean cuales sean sus necesidades?
Soy muy defensor de la escolarización de los alumnos con discapacidad o diversidad funcional en la escuela ordinaria, muy defensor que todos los alumnos puedan beneficiarse de un entorno entre iguales y puedan recibir una educación en el mismo lugar que tal vez estudian sus hermanos, amigos o familiares. Pero la escuela en nuestro país por su diseño, organización y estructura no se va ajustar en su totalidad a convertir al alumno en el centro de su aprendizaje. Es la escuela la que debería adaptarse al alumno y no al contrario, y este aspecto es el que más va a costar llevar a la práctica educativa real.
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