cuando sucedió la caída de Bonampak
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Bonampak que significa "Muros pintados" con 1,593 habitantes, conocido antiguamente como Ak'e y en sus inmediaciones como Usiij Witz, "Cerro del Zopilote",[1] es un sitio arqueológico de la cultura maya en el estado de Chiapas, México. El sitio que yace cerca de un afluente del Río Usumacinta y está a unos 21 kilómetros al sur de Yaxchilán, bajo el cual Bonampak estuvo subordinado. Mientras que el sitio no es excesivamente impresionante en términos de tamaño espacial o arquitectónica, (Sylvanus Morley realizó una jerarquización de las ciudades mayas en términos de tamaño e importancia política, siendo Bonampak una ciudad de cuarta categoría) debe su fama a los murales de tres cuartos completamente pintados ubicados dentro de la Estructura 1 (Templo de los Murales). La construcción de la estructura del sitio data del Periodo Clásico Tardío. (580 a 800 d. C.)
Bonampak
Usiij Witz
Bonampak pyramid.jpg
Bonampak.
Localización geográfica
Continente
América
Región
Norteamérica
Coordenadas
16°42′14″N 91°03′54″O / 16.704, -91.065
Localización administrativa
País
Bandera de México México
División
Chiapas
Localidad
Ocosingo
Historia del sitio
Época
Periodo clásico maya
Cultura
Maya
Hallazgos y descubrimiento
Descubrimiento
Pepe Chambor y Acasio Chan
Mapa de localización
Bonampak ubicada en MéxicoBonampakBonampak
Bonampak ubicada en ChiapasBonampakBonampak
[editar datos en Wikidata]
Además de estar entre los murales mayas mejor conservados, son dignos de mención por derrumbar la temprana suposición de que los mayas eran una cultura pacífica (una larga posición argumentada por el arqueólogo del Instituto Carnegie de Washington, Sir John Eric Sidney Thompson), mostrando los murales claramente el oficio de la guerra y el sacrificio humano. Se suele decir que la zona arqueológica fue descubierta por Giles Healey y Mateo Bolívar, entre abril y mayo de 1946, quienes fueron informados por los indígenas lacandones, llegando varias veces a la zona, cuando se dirigían a realizar cultos en los edificios de la ciudad. Sin embargo, como en muchos otros casos, los indígenas ya conocían la localización del sitio, y el hallazgo se atribuye hoy a dos de ellos: José Pepe Chambor y Acasio Chan.
Explicación: