Cuando las fábricas rusas entraron en huelga general explotó la crisis económica del país, estas protestas obreras, que fueron apoyadas por el ejército, denunciaban la participación en la Primera Guerra Mundial y produjeron
Respuestas a la pregunta
Respuesta: Corona porfa
La crisis española de 1917 coincidió con una coyuntura internacional especialmente crítica en ese mismo año, posiblemente uno de los más cruciales en toda la Historia. En cambio, la historiografía mundial no suele emplear el nombre de crisis para este periodo, reservándolo para algunas cuestiones puntuales relacionadas con la Primera Guerra Mundial como la crisis de reclutamiento en Canadá1 y la crisis de construcción naval en Estados Unidos.2 Hay que recordar que España en la Primera Guerra Mundial se mantuvo neutral durante todo el conflicto.
La crisis española de 1917 hace referencia al conjunto de sucesos que tuvieron lugar en el verano de 1917, y en concreto a los tres desafíos simultáneos que hicieron peligrar al gobierno del conservador Eduardo Dato e incluso al mismo sistema de la restauración borbónica en España: un movimiento militar protagonizado por las Juntas de Defensa; un movimiento político concretado en la Asamblea de Parlamentarios celebrada en Barcelona y convocada por la Lliga Regionalista; y un movimiento social que culminó con la huelga general revolucionaria de 1917.
Explicación:
Quien esto escribe es Sofía Casanova, escritora y periodista coruñesa y corresponsal permanente del diario ABC, que asistía en San Petersburgo a las vísperas de la toma del palacio de invierno y de la Revolución de octubre de 1917 de la cual se cumple su centenario este año. Sus crónicas llegaban a España con semanas de retraso. Su condición de única corresponsal de un diario, la llevó a entrevistar a León Trotsky, uno de los líderes de la revolución y creador del Ejército Rojo.
Los acontecimientos en Rusia obsesionaban al rey Alfonso XIII quien, quince días después de la caída de los zares, suspendió las garantías constitucionales, atemorizado por la creciente actividad y el descontento del movimiento obrero.
El trienio bolchevique
Esta es la denominación que se da al periodo entre 1917 y 1920, en el que se dio un aumento de las luchas entre los jornaleros andaluces así como emblemáticas huelgas con epicentro en las grandes urbes. Las esperanzas suscitadas por las noticias que llegaban de la revolución rusa en las masas pobres de la ciudad y el campo se expresaron en duras luchas y huelgas que marcaron un antes y un después. El reparto de la tierra llevado a cabo por los bolcheviques inspira a los jornaleros del sur que a partir del 18 cobran fuerza.
Sin embargo los hitos más importantes se dieron en las grandes ciudades, como la huelga general del 17, que es la entrada en escena de la clase obrera en la crisis de la restauración y huelgas como La Canadiense de 1919 que harán a la clase obrera irrumpir con fuerza.
Este periodo constituye un ensayo general revolucionario de lo que será posteriormente la revolución española y la guerra civil.
A pesar de que España se mantuvo neutral en la primera guerra mundial, no escapó a algunos de sus efectos, en especial para las clases trabajadoras. Los jornaleros sin tierras y los proletarios industriales sufrían la inflación, que reducía el poder de compra real de los salarios, que junto al desabastecimiento y el desempleo fueron factores que despertaron las protestas de este periodo convulso.
Estas constituían la contracara de los desorbitados negocios de capitalistas y oligarcas que aprovechaban la situación.
También la Guerra del Rif en Marruecos, de carácter imperialista, que castigaba con el reclutamiento a los trabajadores mientras las clases pudientes lo eludían -abonando una cantidad de dinero- fue uno de los elementos que crispo el periodo.
Incluso las tensiones dentro del ejército por la política de asensos, así como lo que se consideraba la falta de mano dura con los levantamientos obreros, dio a luz ya en 1917 a las “juntas de defensa”, organizaciones corporativas de oficiales que eran expresión de la división en sus filas y de las tensiones con el gobierno.