¿cuando escuchas La expresión la esencia del hombre con que lo relacionas?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
La esencia del hombre, asequiblemente mi ser razona, y piensa en una de las ramas metafísicas, la ontología, sobretodo en la acepción ostensible de: "¿qué es el ser?" ; con la variable humano sería: "¿qué es el humano?", en respuesta a lo anterior, se ostentaron varias teorías, verbigracia, Marx postulaba que la esencia del ser humano es en sí la consciencia, la cual está hecha de materia, lo cual era un monismo ontológico, entonces, la ontología de la consciencia es la materia, a su vez el único elemento de la esencia del ser humano, aunque claro, actualmente por mismas teorías metafísicas de nuestro ser e incluso en el ámbito científico, se presenta que la consciencia aparte de materia, ostenta amalgama con un valor agregado (aún desconocido), convirtiéndose este en un no-dualismo ontológico, es decir, materia + valor agregado (sustancias netamente diferentes) no son un dualismo ni un monismo, sino un no-dualismo ontológico. Y esto se emplaza en tela de juicio en la narrativa transhumanista, ya que los que propugnan que la ontología del ser humano es afectada, pues, es respondido con: "el estatuto ontológico que forma la razón no será afectado por las liberaciones morfológicas y cognitivo-moral", aunque esto resulta ambiguo, porque en el paradigma contemporáneo no es comprobable aquella afirmación, lo que sí es plausible de visualizar es la modificación de la genética (caso de Lulu y Nana) e incluso adherencia de prótesis para la transición de un homo sapiens a cyborgs (homo deus), aunque claro, ello también es indeterminado contemporáneamente, ya que incluso ambientándonos en la política, esto creará una desigualdad exacerbada entre la humanidad. Aunque bueno, respecto al ámbito filosófico, tenemos a Teilhard de Chardin, el cual ostenta una ontología biológica, tecnológica y humana, la cual a futuro se realizará en una mescolanza, la cual vuelvo a recalcar no quebranta el estatuto ontológico (aún no comprobado). En fin, los límites de esta narrativa siendo aún indefinidos y meliorista en la propugnación de algunos, emplaza en juicio lo que consideramos como el ser humano con cómo creemos que es el ser humano, además de respaldarse en la misma historia y tecnología actual, y donde predominantes los sentimientos, no es plausible dejar el maremágnum de la confusión de la misma esencia del ser humano, ya que si esta es palpada, de por sí la narrativa mencionada entraría en aún más conflictos e incluso contradicciones por los adeptos que la propugnan.