Cuáles son los materiales que forman el agua saborizada
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Cómo preparar aguas saborizadas
Base de agua + fruta o verdura
La base por supuesto es el agua. Ésta puede ser mineral, del grifo, con gas e incluso agua de coco. Una opción u otra dependerá de gustos y de la idoneidad en la combinación con el resto de ingredientes.
Para darle cuerpo al agua podemos utilizar infusiones y tés, frutas y/o verduras que le darán el sabor principal a nuestra agua saborizada:
Frutas: sandía, melón, melocotón, frambuesas, fresas, moras, limón, pomelo, mango, manzana, pera…etc. Cuánto más madura, más sabor y dulzor tendrá el agua.
Verduras: pepino, zanahoria, hinojo, pimiento verde y rojo, calabacín, apio…, etc.
Infusiones y tés: té verde, rooibos, té de frutos del bosque, manzanilla, infusión de jengibre… etc.
Una vez escogida la fruta y verdura es necesario cortarlas en láminas finas, de forma que se exponga la mayor superficie en contacto con el agua.
Saborizantes
Son los que le dan el toque final y hacen que un agua saborizada sea un éxito o un agua con ligero sabor sin más. Como en cualquier actividad culinaria, es necesaria práctica, empezar con poca cantidad e ir probando nuevas combinaciones:
Especias y hierbas aromáticas: deben ser frescas para transmitir gran parte de su aroma. Las más utilizadas son menta, hierbabuena, jengibre, romero, lavanda, tomillo, albahaca, vainilla y salvia.
Cubitos de hielo rellenos: no son imprescindibles y tampoco son los responsables del aroma del agua, al menos no desde el principio. Además de lo visualmente bonitos que quedan, a medida que se derriten van transmitiendo las características organolépticas que incluyen. Por ejemplo: cubitos de naranja y romero, de moras, de arándanos, de frambuesas y menta…, etc.